Los jueces reprochan a la prima de Feijóo haber protegido al médico de su hospital acusado de trato vejatorio
EL Tribunal Superior de Xustiza de Galicia desestima el recurso del jefe de otorrinos cuya actitud provocó la huelga de nueve meses de los facultativos de su servicio.
A Coruña--Actualizado a
El Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) ha revocado la sentencia de un juzgado de lo Contencioso-Administrativo que declaró contrario a derecho el cese del jefe de servicio de otorrinolaringología del Complejo Hospitalario Universitario de Santiago (CHUS), Carlos Martín. Los magistrados, al contrario que la jueza de primera instancia, consideran que su destitución estaba justificada y fundamentada en su comportamiento agresivo y en el trato vejatorio que deparaba a sus subordinados.
Los jueces de la sección primera de la sala de lo Contencioso del TSXG reprochan además a la gerencia del área sanitaria de Santiago, que por entonces dirigía Eloína Núñez Masid, prima de Alberto Núñez Feijóo, haber mantenido en su puesto a Martín durante años. De hecho, critican que no cumpliera la ley que obligaba a la gerencia a que el ejercicio del cargo del jefe de servicio fuera evaluado periódicamente.
El conflicto del jefe de otorrinos con la mayoría de médicos de su departamento motivó hace tres años una huelga de nueve meses, una de las más largas que se recuerdan en la sanidad gallega y que disparó las listas de espera hasta niveles que todavía se arrastran hoy.
Martín fue nombrado en 2016, un año antes de la llegada de Núñez Masid a la gerencia de Santiago desde la de Ourense, por el procedimiento de evaluación colegiada, que obliga a la Administración sanitaria a valorar su trabajo cada cuatro años, y a revocarlo del puesto en caso de que el resultado de esa evaluación sea negativo. La dirección de Núñez Masid no abrió nunca ese proceso, pese a que conocía los problemas del servicio.
Violencia verbal y vejaciones
En junio de 2021, los otorrinos se dirigieron a ella por escrito para informarle de que Martín mostraba de forma reiterada "una actitud autoritaria y violenta", recuerda la sentencia, con "violencia verbal con gritos, incluso en público y con pacientes delante, vejaciones reiteradas a varios miembros del servicio, cuestionando su valía profesional e incluso personal, y violencia física, como agarrar de forma violenta a una facultativa del servicio provocándole un hematoma en un brazo".
Núñez Masid no hizo caso de las denuncias ni tomó medida alguna, lo que motivó que cinco meses después los otorrinos iniciaran una huelga que, según los jueces "produjo un importante deterioro de la actividad asistencial": más de 3.642 pacientes en espera de primera consulta, con una demora media de más de 98 días. Las reclamaciones de los usuarios se multiplicaron por cuatro y pasaron de las menos de 150 en el primer semestre de 2021 a casi mil en el mismo período de 2022.
En septiembre de ese año, los otorrinos pusieron fin a la protesta después de que la Xunta forzara a Núñez Masid a resolver el conflicto y a crear una comisión para estudiar sus denuncias. Sobre las conclusiones de ese comité, el Sergas basó la decisión de suspender primero dos meses por falta grave y cesar después a Martín, es decir más de un año después de que los otorrinos advirtieran por escrito a la gerente del punto al que había llegado la situación.
"Resulta inexplicable", abunda la sentencia, fechada el pasado 15 de octubre pero que no ha trascendido hasta ahora, "que no se haya efectuado la referida evaluación [del desempeño del cargo del jefe de servicio de otorrinos], que podría haber evitado [...] toda la problemática posterior". Es decir, la huelga y el deterioro de la capacidad asistencial del servicio en que derivó el caos en el departamento.
Según los últimos datos del Sergas, referidos a junio de este año, las listas de espera para una consulta en otorrinolaringología en Santiago son las más altas de los hospitales de Galicia: 55,9 días, es decir 20 días más que en A Coruña, 26 más que en Ferrol, 21 más que en Ourense y 12 más que en Vigo.
El Sergas destituyó a Núñez Masid el pasado mayo, aunque el sucesor de Feijoó en la Xunta, Alfonso Rueda, la ha recolocado nombrándola para un alto cargo en la Consellería de Política Social. Este verano, Público desveló que justo antes de su cese había tramitado dos concursos que adjudicaron otros tantos contratos por más de 4 millones de euros al Grupo Eulen, la empresa cuya directora para Galicia es su prima Micaela Núñez Feijóo, hermana del presidente del PP. Además, infló el contrato en mas de 600.000 euros.
Este diario también desveló que después de que su primo Alberto la nombrara gerente de los hospitales de Ourense, creó una plaza que no existía en su hospital para asignársela a su propio esposo, Francisco José Aramburu Vilariño.
Comentarios de nuestros suscriptores/as
¿Quieres comentar?Para ver los comentarios de nuestros suscriptores y suscriptoras, primero tienes que iniciar sesión o registrarte.