Este artículo se publicó hace 8 años.
Series zombis, que no de zombis
Viejos e ilustres apellidos de la pequeña pantalla como Tunner, Mulder, Scully, Bennet, Nakamura y Gilmore resuenan con fuerza en medio de un singular fenómeno que resucita antiguas series de éxito en busca de una nueva vida en pos de la nostalgia.
María José Arias
-Actualizado a
MADRID.- Algo está pasando en la televisión que cada vez son más las series que triunfaron hace una o dos décadas y ahora despiertan como si fuesen zombis levantándose de sus tumbas persiguiendo el fantasma de un Jack Bauer resucitado para que viviese otro día y volver a enviarlo al otro mundo catódico tras una nueva tanda de episodios.
La lista cada vez es más larga y se siguen sumando proyectos futuros en medio del revuelo entre emocionado y cauteloso de la activa comunidad de fans que se mueve en las redes sociales. La (pen)última en sumarse al club de estas series zombis, que no de zombis, ha sido Madres forzosas. Entra directa al selecto grupo en el que la reina presente es Expediente X y la futura, Twin Peaks. Todas con la nostalgia como mejor baza y principal ingrediente para alcanzar el éxito.
Desde el 26 de febrero está disponible en Netflix la temporada al completo, 13 capítulos en los que esta vez las protagonistas son las hijas (no todas) de Danny Tunner (Bob Saget). La mayor, D.J. (Candance Cameron Bure), recoge el testigo de su padre como viuda, con tres retoños, que tiene que afrontar el reto de ser madre soltera. El planteamiento es el mismo que en la serie original y solo cambia el género de los protagonistas. Ahora los progenitores forzosos son chicas (lo del título nunca encajó demasiado pero había que mantenerlo y adaptarlo) y los vástagos, chicos. D.J. es la doliente viuda y sus ‘ayudantes’, su hermana Stephanie (Jodie Sweetin) en el papel del tío Jesse (John Stamos) y la cargante vecina Kimmy Gibbler (Andrea Barber) en el del amigo Joey (Dave Coulier). La única diferencia con la original es que Kimmy tiene una hija, Ramona. Por lo demás, el espíritu es el mismo, la musiquilla y las risas enlatadas también. Lo mejor del piloto es cuando apelan a la nostalgia o hacen referencia a la ausencia de la hermana pequeña Michelle, a la que daban vida las hermanas Olsen.
Noah Bennet (Jack Colleman) y sus chicos con poderes regresaron para salvar de nuevo el mundo del abismo al que estaba destinado para luego volver al baúl de los recuerdos al que la NBC les había condenado tiempo atrás después de cuatro temporadas que fueron de más a menos. No habrá segunda temporada más allá de lo que se denominó serie-evento al no terminar de cuajar. Una pena, porque comenzó bien, como su predecesora, pero a medida que pasaron los capítulos, 13 en total, el argumento fue cayendo en los mismo errores de antaño. Ni siquiera haber recuperado a un personaje tan carismático como Hiro Nakamura (Masi Oka) o sacarse de la manda el de Luke (Zachary Levi) sirvió para que prosperarse y se perpetuase en antena.
Ha sido uno de los regresos más esperados y puede que no sea temporal. Seis capítulos parecen poco para volver a disfrutar de Fox Mulder (David Duchovny) y Dana Scully (Gillian Anderson) y Chris Carter ya ha avisado que pese a que no todo el mundo ha quedado satisfecho con esta serie-evento (está muy de moda el término) a él ya le han encargado más capítulos desde Fox. La crítica está dividida con el resultado, pero lo cierto es que las audiencias han sido buenas y de ahí que la cadena que auspicia la serie esté dispuesta a seguir dándole oportunidades. Otra cosa es que los principales implicados, Anderson y Duchovny, estén por la labor de continuar. Carter, por su parte, asegura que tiene mucho que contar aún.
Netflix parece estar especializándose en cierta manera en esto de resucitar series. Acaba de hacerlo con Padres forzosos en su versión femenina y trabaja para traer de vuelta Las chicas Gilmore. Aquel drama en el que las protagonistas eran una madre y su hija y todo lo que les sucedía a ellas y a su entorno. Siete temporadas se mantuvieron en antena Lorelai (Lauren Graham) y Rory (Alexis Bledel). Ambas se sentían tentadas por recuperar aquellos personajes que tantos buenos ratos y fama les proporcionaron pero condicionaban su regreso al de la otra. Al final ambas se sumaron al proyecto. Como lo hicieron Milo Ventimiglia (quien no volvió para Héroes pero sí lo hará para Las chicas Gilmore), Matt Czuchry, Liza Weil, Yanic Truesdale, Scott Patterson, Kelly Bishop, Keiko Agena y Sean Gunn. No hay fecha ni título aún, pero sí se sabe que serán cuatro capítulos de noventa minutos de duración cada uno.
Vuelve no sin sobresaltos y con un año de retraso sobre la fecha para el reencuentro que Laura Palmer (Sheryl Lee) le proponía al agente Dale B. Cooper (Kyle MacLachlan) al final de aquellas dos temporadas de culto que tanto impactaron al público de los noventa de la mano de Mark Frost y David Lynch. El próximo año regresará ese mundo oscuro, sucio y onírico con un reparto que no deja de crecer con nombres del peso y la talla de Laura Dern, Naomi Watts y Ashley Judd. Estarán Cooper y Palmer, pero poco ha trascendido sobre una tercera temporada que se estrenará 26 años después del final de la anterior y que constará de 18 capítulos. Twin Peaks revive y lo hace con un gran despliegue, un reparto potente y nada de pocos episodios para probar a ver qué tal.
Después de cuatro temporadas, una tv-movie y matar a uno de los personajes principales, Prison Break regresará en forma de secuela, recuperando la trama varios años después de donde la dejó en 2009 y explicando, se entiende y espera, cómo es posible que ese personaje que murió siga respirando. Fox, que ya resucitó 24 y Expediente X, hará lo propio con Prison Break, serie que conquistó a crítica y público y que contará con sus dos principales rostros en su renacimiento. La participación de Wentworth Miller y Dominic Purcell es un hecho. Aunque tendrán que encontrar un hueco en su agenda, ya que ambos se encuentran inmersos en el spin-off de The Flash, Legends of Tomorrow. Tienen tiempo. Paul Scheuring, creador de la serie, trabaja todavía en dar forma a los guiones de los diez capítulos que compondrán la nueva temporada.
Primero los Tunner, ahora los Banks… ¿quiénes serán los próximos? ¿Los Winslow? La comedia de los noventa se hace hueco en la pequeña pantalla. O, al menos, esa es su intención. La de Will Smith es recuperar la historia que le dio fama y dinero y a la que tanto le debe. En fase de proyecto aún sin concretar demasiado, parece que se trataría de un remake que conservaría los ingredientes que hicieron de la historia de Will y los Banks un éxito de los noventa. Un joven humilde de Filadelfia que se muda a vivir con sus parientes ricos de Bel Air. Smith está involucrado en el proyecto, pero solo como productor y promotor de la idea. Que haga algún cameo o no habrá que verlo.
Comentarios de nuestros suscriptores/as
¿Quieres comentar?Para ver los comentarios de nuestros suscriptores y suscriptoras, primero tienes que iniciar sesión o registrarte.