Como cada año, esta Nochebuena el rey Felipe VI ha pronunciado su tradicional discurso navideño. El jefe del Estado ha pasado por encima de la grave crisis institucional consecuencia del bloqueo por parte de la derecha para renovar el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y el Tribunal Constitucional, si bien ha subrabrado tres "riesgos" que afectan al país: la división en la sociedad, el deterioro de la convivencia y la erosión de las instituciones.

Políticos de todas las ideologías han reaccionado a la alocución del monarca. Desde el PSOE y las derechas han alabado su discurso, mientras que Unidas Podemos y los socios de Gobierno se han mostrado muy críticos a las palabras de Felipe VI. 

PSOE: "El jefe de Estado es consciente de los desafíos del país"

El PSOE ha señalado en un mensaje en Twitter que, con sus palabras, el rey demuestra que el jefe del Estado es "consciente de los desafíos del país" y de que España solo puede avanzar "desde la unidad, el respeto a la Constitución y la integridad de las instituciones".

También desde las filas socialistas, el presidente de Aragón Javier Lambán (PSOE) se pronuncia en la misma línea, si bien añade que el del monarca es un "mensaje reconfortante que nos emplaza a todos a la reflexión, a la autocrítica y a la moderación".

Más crítico ha sido el diputado en el Congreso Odón Elorza, que tras el discurso se ha lamentado en un tuit: "Qué decepción. Y luego de propina en TVE... Raphael. Va de retro".

Unidas Podemos lo califica de "decepcionante"

Desde Unidas Podemos, se ha pronunciado el diputado Rafa Mayoral, quien -al igual que Olorza- ha calificado el discurso de "decepcionante". El parlamentario ha lamentado que Felipe VI "sea incapaz de cumplir la función institucional de arbitrar y moderar los poderes del Estado". "Solo se puede hacer desde la legitimidad democrática", ha añadido.

Además, ha lamentado que Felipe VI no mencionase el archivo de las actuaciones penales en contra del rey emérito, Juan Carlos I, ni las resoluciones en los tribunales de Londres. "No deja de sorprendernos porque estamos en un momento de debate constitucional en torno a la configuración de la Jefatura del Estado", ha destacado.

Asimismo, por parte de la formación morado el diputado vasco Roberto Uriarte ha apuntado que, aunque el rey haya aludido a la "erosión" de las instituciones, lo ha dicho "simplemente como si esto fuera un fenómeno meteorológico" cuando, a su juicio, se trata de "una estrategia".

El PP habla de "gran discurso" de Felipe VI

Desde el Partido Popular han sido mucho más entusiastas en sus reacciones al discurso de Felipe VI. Su presidente, Alberto Núñez Feijóo, presidente del Partido Popular (PP) ha afirmado en su cuenta de Twitter que en su formación comparten "el gran discurso de S.M. el Rey" y ha añadido:  "Confiamos en España y en el futuro que podemos construir unidos".

En el mismo tono se ha pronunciado la secretaria general de los populares, Cuca Gamarra, que sostiene que el monarca "nos muestra el camino para mejorar nuestro porvenir como nación" y considera "acertadas" sus "llamadas a la concordia, los valores constitucionales y al interés general para fortalecer nuestras instituciones".

Desde Castilla y León, el líder popular en la comunidad, Alfonso Fernández Mañueco considera que, con sus palabras, el rey "ha marcado la necesidad de reforzar nuestro compromiso con la democracia y con Europa". El presidente gallego, Alfonso Rueda, califica este discurso como "otra lección de altura y de sensibilidad" de Felipe VI, mientras que la líder madrileña, Isabel Díaz Ayuso, sostiene que el monarca "nos llama a creer en nosotros mismos, a la convivencia, a la concordia y a cuidar las instituciones".

También desde las derechas, la presidenta de Ciudadanos, Inés Arrimadas, ha valorado las palabras del monarca como "un discurso a la altura de la gravedad del momento que vive España" y considera que "ha acertado enormemente al indicar las soluciones: unidad, convivencia y unas instituciones fuertes", al tiermpo que ha asegurado que de ese modo van a estar "los liberales". 

Por su parte, los ultraderechistas de Vox ha mostrado su apoyo al discurso de Felipe VI extractando en su cuenta de Twitter un fragmento del mismo y ha terminado su mensaje felicitando la Navidad a la Familia Real.

Del arco parlamentario de la derecha, también se ha pronunciado el secretario general de Coalición Canaria, Fernando Clavijo. En su opinión,  el rey "acierta en ese llamamiento a la responsabilidad y a la reflexión sobre los peligros y consecuencias del deterioro de las instituciones que puede afectar a la convivencia".

"No dar por sentadas las instituciones ni lo conseguido tras 44 años de democracia es un mensaje que va directo a los principales actores de esta crisis institucional que vivimos", afirma, al tiempo que lamenta que este llamamiento "caiga en saco roto y sea tan solo un brindis al sol"

Los socios de Gobierno, muy críticos con el discurso

El portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, ha sido claro y conciso en su reacción a la alocución de Felipe VI. Lo ha hecho en Twitter, donde ha publicado una foto del monarca, de niño, dando la mano a Franco, acompañado de una breve frase: "No hay que olvidar nuestros orígenes".

Por su parte, el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, se ha mostrado "muy alejado" de lo que representan la Familia Real y "la arquitectura institucional del régimen de 1978": "La monarquía no es ejemplo de rectitud ni de integridad", ha resuelto.

Asimismo, ha asegurado que "el discurso del rey no ha aportado ninguna novedad" y le ha "reafirmado" en sus "valores republicanos".

El líder de Más País, Íñigo Errejón, también ha sido muy escueto en su respuesta al rey. "Llamarle 'polarización' al secuestro de las instituciones es elegir", ha afirmado en sus redes sociales. 

Desde Euskadi, el diputado de EHBildu Jon Iñarritu ha calificado el mensaje de Navidad del rey como un discurso "vacío de contenido", en el que ha obviado el tema territorial.

"El rey pone de ejemplo el espíritu de la transición y palabras huecas que lo único que buscan es legitimar su figura. Un tostón soporífero indeterminado para que cada uno entienda lo que quiera", ha criticado Iñarritu.

Ha destacado a su ves que el discurso "llama más la atención por lo que no dice. No se ha referido a los asuntos más graves del año, ni a la tragedia de Melilla, ni Pegasus, ni el golpe del Tribunal Constitucional han estado".

Por parte del PNV, su portavoz en el Congreso, Aitor Esteban, ha invitado al rey "a adaptarse a los tiempos y aceptar la realidad de las naciones", con las modificaciones constitucionales que implicaría.

El diputado nacionalista ha asegurado que Felipe VI "debería darse cuenta de que hay colectivos amplios que no han estado nunca de acuerdo con la Constitución, y algunos de los que estuvieron, hoy en día la cuestionan".

Sobre otro de los puntos que ha mencionado el monarca también se ha pronunciado Esteban. En concreto, en lo referente a la "erosión de las instituciones" sostiene que "reparte culpas de una manera generalizada, sin apuntar a nadie". 

Ha mentado también a Juan Carlos I el del PNV, al recordarle al actual monarca que "seguimos asistiendo a una serie de escándalos relacionados con su padre". Por ello, le ha pedido que impulse la reforma para "que se limite la inviolabilidad del rey a las funciones públicas". "Que se aplique el cuento más allá de generalidades repartiendo culpas", ha zanjado.

Greenpeace evidencia los silencios del rey en su discurso

La ONG Greenpeace también ha evidenciado otro de los grandes temas olvidados por Felipe VI en su discurso navideño: la crisis climática. Sequías, grandes oleadas de incendios, temperaturas extremas... Ninguno de estos fenómenos tan habituales ya en España ha estado presente en la alocución del rey. 

Así lo ha evidenciado la organización ecologista en su cuenta de Twitter: "2022 ha sido el año más caluroso desde que hay registros, hemos tenido los peores incendios que se recuerdan en España y una sequía galopante, pero el rey no ha dicho ni una palabra sobre la crisis ambiental en su discurso", ha afirmado, para a continuación calificar esta ausencia de "inaceptable".