El Consejo de Ministros ha aprobado este martes la ley de familias elaborada por el Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030. La norma llega con casi dos meses de retraso respecto al acuerdo presupuestario alcanzado entre el PSOE y Unidas Podemos, pero finalmente ha recibido luz verde, por lo que se dará el visto bueno a nuevos permisos y derechos de conciliación, toda vez que sea aprobada en las Cortes Generales.

La ministra del ramo, Ione Belarra, ha comparecido este martes en La Moncloa y ha dicho que la aprobación de la ley de familias "es una buena noticia". La secretaria general de Podemos ha calificado la norma de "una de las leyes más importantes de este curso político".

Para la titular de Derechos Sociales, el principal objetivo del texto es la ampliación de nuevos permisos de conciliación y el reconocimiento legal de todos los diversos tipos de familias que hay: "En España hay muchas formas de ser familia y era fundamental reconocerlas y avanzar en el reconocimiento de derechos de todas ellas", ha explicado.

En este sentido, ha hecho un repaso por las medidas más importantes que recoge la norma y, en especial, por los nuevos permisos que otorga a la ciudadanía para el cuidado de familiares, hijos y convivientes.

El retraso en la aprobación de la ley de familias supondrá también un retraso a la hora de llevar el texto al Congreso de los Diputados, y su tramitación no comenzaría, en principio, hasta el próximo año. 2023 será electoral (autonómicas y municipales en mayo y, después, generales), por lo que los plazos para su aprobación están bastante ajustados.

Preguntada por esta cuestión, Belarra no ha garantizado su aprobación en esta legislatura, pero ha insistido en que ese es el objetivo: "Nuestro objetivo con la ley de familias es que corramos lo máximo posible para tenerla aprobada cuanto antes. Es una norma imprescindible para que todas las familias se vean reconocidas, y lo haremos lo más pronto posible", ha defendido la ministra de Derechos Sociales.