El Gobierno prorroga las deducciones en el IRPF en materia de eficiencia energética y en la compra de vehículos eléctricos

El Consejo de Ministros ha dado luz verde a un real decreto ley que incluye medidas clave para 2025, centradas en beneficios fiscales, incentivos a la transición energética y ajustes presupuestarios. Estas acciones buscan, en palabras del propio Gobierno de coalición, beneficiar a las familias, autónomos y sectores estratégicos, además de garantizar la sostenibilidad económica en un año de prórroga presupuestaria.

"Este Gobierno sigue trabajando para elaborar y preparar unos nuevos Presupuestos, cuya aprobación sigue siendo una prioridad. Hasta que eso se produzca, es necesario adoptar los criterios de prórroga de los Presupuestos vigentes en 2024 hasta la aprobación de las nuevas cuentas públicas", explican desde el gabinete de María Jesús Montero.

Prórroga las deducciones en eficiencia energética

El Ejecutivo ha decidido extender hasta el 31 de diciembre de 2025 las deducciones fiscales destinadas a la eficiencia energética y la movilidad sostenible. Estas incluyen deducciones de hasta un 60% en el IRPF por obras de mejora energética en viviendas y un 15% en la compra de vehículos eléctricos enchufables o de pila de combustible, así como en la instalación de puntos de recarga. Estas iniciativas forman parte del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, que busca cumplir los objetivos climáticos y modernizar las infraestructuras residenciales del país.

En el ámbito empresarial, se ha prorrogado la libertad de amortización para inversiones en energía renovable. Con esta medida, el Ejecutivo pretende facilitar el cambio hacia fuentes autóctonas y renovables, reforzando la competitividad y la seguridad energética nacional mientras se lucha contra el cambio climático.

Apoyo a autónomos y simplificación tributaria

Otro punto destacado del decreto es el compromiso con los autónomos. Durante 2025, se mantendrán los límites que permiten acogerse al método de estimación objetiva en el IRPF y al régimen simplificado del IVA. Esta medida pretende dotar de mayor estabilidad a miles de pequeños negocios en un contexto de incertidumbre económica.

Asimismo, se eleva el umbral para la obligación de presentar la declaración de la renta. A partir de 2025, los contribuyentes con varios pagadores estarán exentos de declarar si sus ingresos adicionales no superan los 2.500 euros, un aumento significativo respecto a los 1.500 euros actuales. Este cambio beneficiará a trabajadores con ingresos más bajos, reduciendo sus cargas fiscales.

Se retrasa el impuesto a los cigarrillos electrónicos

Entre las novedades, el impuesto a los líquidos de cigarrillos electrónicos se retrasa hasta abril de 2025, ofreciendo un margen de adaptación a las empresas del sector. En paralelo, se introduce un nuevo gravamen temporal para grandes operadores del sector energético, incentivando proyectos esenciales para la transición ecológica y la descarbonización.

Respuesta a emergencias

El decreto también aborda la reconstrucción tras desastres naturales, como la reciente DANA, con un nuevo componente presupuestario que reasignará recursos para atender los territorios afectados. Por otro lado, se flexibiliza la Ley de Contratos del Sector Público para facilitar la promoción de viviendas sociales y asequibles.

Financiación regional

Con el fin de garantizar la sostenibilidad financiera de las comunidades autónomas, se prorrogan las entregas a cuenta sobre la base de las actualizaciones de 2024, reduciendo el desfase respecto a los ingresos esperados en 2025. Además, se autoriza al País Valencià a endeudarse para cubrir los gastos extraordinarios derivados de la DANA.