Nueva jornada de protestas en Francia contra la reforma de las pensiones de Macron

Las protestas contra la reforma de las pensiones en Francia vuelven este martes a las calles del país con una nueva jornada nacional de huelgas y manifestaciones que buscan influir en el debate que mantendrá el próximo jueves la Asamblea Nacional sobre una propuesta para derogar esa norma.

La reforma elevó de 62 a 64 años la edad mínima de jubilación y aumentó de 42 a 43 años el período de cotización necesario para tener una pensión completa.

Se trata de la decimocuarta protesta estatal que los sindicatos han convocado de forma unida desde mediados de enero, después de que la reforma fuera aprobada el pasado mes de abril por decreto del Gobierno del presidente Emmanuel Macron y no mediante su aprobación en la Asamblea Nacional, donde el Ejecutivo no tiene la mayoría necesaria.

4.000 policías en París

Hay 250 manifestaciones convocadas en todo el país, para las que las autoridades anticipan la participación de hasta 600.000 personas. El Ministerio del Interior ha preparado un despliegue de 11.000 agentes, 4.000 de ellos solo en París, después de los incidentes violentos provocados por grupos minoritarios durante la anterior jornada de protestas, el pasado 1 de mayo, coincidiendo con el Día Internacional del Trabajo.

Se esperan también paros en sectores estratégicos como el transporte, aunque sólo se prevé que sean destacables en la aviación, ya que el ferrocarril se verá menos afectado. Se han suprimido el 33 % de los vuelos en el aeropuerto parisino de Orly y un 20 % en los de Lyon, Marsella, Niza, Toulouse, Burdeos y Nantes, lo que supone varios cientos de operaciones. También podrían verse afectados otros que transiten por el espacio aéreo francés.

La protesta busca presionar al pleno de la Asamblea, que el jueves examinará una proposición de ley de un grupo minoritario de oposición, LIOT -de centroderecha y regionalista-, que pretende anular la reforma y que no tiene prácticamente ninguna posibilidad de prosperar.

Macron busca impedir la votación

Durante el examen en comisión de la propuesta, el bloque que apoya a Macron consiguió vaciarla de contenido, y aunque la oposición pretende reactivarla, la presidenta de la Asamblea Nacional, la macronista Yaël Braun-Pivet, ha anticipado que recurrirá a un artículo constitucional para impedir que sea sometida a votación.

Los presidentes de seis grupos parlamentarios de la oposición, entre ellos el de LIOT, adviertieron al Gobierno y a Braun-Pivet, de que si no se puede votar la medida, será una "denegación de la democracia" y un "precedente peligroso" que sólo puede suscitar "una desafección agravada" hacia las instituciones, advirtien en una tribuna que publica el diario Le Monde.