Los convenios de 2023 registran la mayor subida salarial de los últimos 15 años
Los convenios acordados por agentes sociales, plantillas y empresas incluyen una revalorización media de los sueldos del 3,46%, con lo que los trabajadores pueden recuperar poder adquisitivo tras el bienio de mayor pérdida en lo que va de siglo.
Zaragoza--Actualizado a
"Los datos son incontestables: están creciendo el consumo, los márgenes empresariales y el empleo, y las subidas salariales se han convertido en un factor clave para el crecimiento económico", señala Patricia Ruiz, secretaria confederal de UGT.
La confluencia de las tendencias alcistas de esos cuatro indicadores, y su coincidencia en el tiempo con una relajación de la inflación, desnuda la inconsistencia de las teorías que durante décadas han equiparado su devenir con el de la metafórica manta que si cubre los pies no tapa la cabeza y viceversa, que se cae cuando el protagonista, en este caso el sistema económico, cambia de postura y adopta una adecuada.
La negociación colectiva ha cerrado el ejercicio de 2023 con la mayor subida salarial de los últimos 15 años, un 3,46% que solo se ve superado en lo que va de siglo por el 3,6% de 2008, el 3,5% de 2001 y el 3,48% de 2003.
Y esas marcas pueden verse rebasadas una vez sean contabilizados los convenios cerrados en el último tramo de diciembre y que todavía no han sido incorporados a la estadística oficial del Ministerio de Trabajo, de la que proceden los datos.
"Después de la firma del quinto Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva (AENC) en mayo la tendencia de las revisiones salariales en los convenios ha sido claramente de aumento", apunta Ruiz, quien matiza que, frente al 3,46% anual, "los firmados a partir de mayo presentan una subida todavía mayor, del 4,1%. Los trabajadores comienzan a cobrar por encima de la inflación".
Esos registros marcan el inicio de la recuperación del poder adquisitivo perdido en los últimos dos años por los trabajadores, que en el mejor de los casos encadenaron una merma del 1,65% en 2021 con otra del 5,39% en 2022 y en el peor, que es en el que se encuentran el tercio de los asalariados que no tuvieron revisiones en esos años, una conjunta de casi doce puntos a la que el año pasado se le añadieron tres y medio más.
"Hay dos datos cruciales: ese casi 3,5%, que está en el entorno del 4% que marcaba el AENC, y el hecho de que el sueldo medio se haya ido a los 2.900 euros brutos. Eso indica que hay una parte de la economía muy dinámica y que puede pagar sueldos altos", explica el sociólogo David Moral Martín, profesor en la Facultad de Ciencias Sociales y del Trabajo de la Universidad de Zaragoza.
El profesor vincula esa revisión al alza de los salarios con tres datos fundamentales que lo explican, aunque no son todos".
Por una parte, "hubo presión para reclamar el desfase entre precios y salarios que se disparó con la guerra de Ucrania". Por otra, "datos como los 21,3 millones de ocupados, los 2,7 de parados y una tasa de ocupación del 52% hablan de un mercado laboral potente y con necesidad de contratar trabajadores, y ahí el principal aliciente es el sueldo".
Y, en tercer lugar, añade el profesor, "se está dando una subida de los márgenes empresariales que está llevando a muchos empresarios a plantearse que mejorar los salarios es una vía para mantener el consumo".
A esos movimientos se les añaden las revalorizaciones del SMI (Salario Mínimo Interprofesional), que ha aumentado un 52% para, a falta de su materialización en un decreto y su eventual ratificación por el Congreso, alcanzar los 1.134 euros brutos mensuales, algo que comienza a tirar al alza de otros sueldos.
"El SMI se encuentra ahora en el entorno de los salarios que recogen un 30% de los convenios firmados, en los que va a haber que revisar los sueldos de algunas categorías en unos casos y de todos los trabajadores afectados en otros", sostiene Ruiz.
Esas mejoras salariales al socaire del SMI se concentran en empresas y en categorías de sectores como el agrario, el comercio, la hostelería o las labores administrativas.
La sindicalista destaca otro aspecto del último incremento del salario mínimo: "Va a suponer más de un punto de recuperación del poder adquisitivo para los trabajadores en situación más vulnerable", y se encuentra claramente por encima de las previsiones del Banco de España para este año, que apuntan a una inflación del 3,3%.
la diferencia entre los sueldos medios en España y en Europa supera los quince puntos
Sin embargo, no todo son flores y violines en el ámbito salarial. "No logramos cerrar la brecha con la UE como sí ocurrió en 2008. Después de aquello llegaron la reforma laboral de 2012 y los descuelgues de los convenios, y hoy la diferencia entre los sueldos medios en España y en Europa supera los quince puntos", apunta Moral Martín, quien recuerda que, "al mismo tiempo nos encontramos con un colectivo de 3,5 millones de trabajadores empobrecidos".
Las mejoras salariales del 3,46% de promedio que se fueron cerrando en la negociación colectiva a lo largo de 2023 tienen, como ocurre con los componentes de cualquier media, matices.
Así, los convenios de 4,6 de los 15,6 millones de asalariados no fueron revisados, mientras que 50.390 vieron congelados sus sueldos e incluso un escueto grupo de 78 tuvo bajadas.
Y del resto, solo los de 4,7 millones de trabajadores, caso un tercio del total, incluyeron subidas de más del 3% (4,91% de media), mientras los de casi otros cuatro se quedaban entre en 2% y el 3% y los de los 2,1 restantes no alcanzaban los dos puntos.
Con todo, la subida media no logra enjugar el avance del IPC y el balance de poder adquisitivo refleja una pérdida de casi una décima y media, aunque sí marca el inicio de una senda de recuperación, como ya ocurrió tras la firma de los anteriores AENC en 2010, 2012, 2015 y 2018.
Arranca el aplazado debate sobre la jornada laboral
Ese comienzo de la recuperación del poder adquisitivo va a coincidir en el tiempo con la apertura, en las próximas semanas, de la negociación de los agentes sociales sobre el otro aspecto nuclear de las relaciones laborales junto con el salarial, que es el de la duración de la jornada.
Esta se encuentra establecida en España en las 40 horas semanales desde 1983, con un mínimo de 36 horas de descanso entre una y otra y otro de doce diarias, aunque también aquí hay matices.
Así, los convenios sectoriales o de ámbito territorial recortan esa jornada semanal legal en una hora y cuarenta minutos y los de empresa la rebajan a menos de 37 y cuarto, aunque la Encuesta de Población Activa revela que casi tres de cada cinco asalariados, 7,5 millones cada semana sin incluir los que libran, la supera.
en Europa la jornada semanal se mueve en una horquilla que va de las 42 horas de Serbia a las 31 de Holanda
"Se suele hablar de la plusvalía absoluta, pero ¿quién tiene en cuenta la relativa?", plantea David Moral Martín, que recuerda cómo en Europa la jornada semanal se mueve en una horquilla que va de las 42 horas de Serbia a las 31 de Holanda.
"Hay una plusvalía relativa que se distribuye con la duración de la jornada y con medidas como los permisos. Tendemos a hablar de salarios, pero también hay que tener en cuenta la jornada si vamos a fijarnos en la remuneración", explica.
Las diferencias salariales entre las comunidades
Por último, la estadística de la negociación colectiva pone sobre la mesa las diferencias que se registran en el ámbito salarial por áreas geográficas.
Por comunidades, las mayores subidas medias, por encima del 5%, se concentran en Murcia y Euskadi mientras que en el extremo contrario las de Castilla-La Mancha, País Valencià y Extremadura no llegan al 3%.
Hay diferencias que se registran en el ámbito salarial por áreas geográficas
"Hay muchas diferencias en las subidas por comunidades", destaca el profesor, quien plantea que "la decisión de que los convenios autonómicos primen sobre los sectoriales o estatales puede afectar a esa mínima igualdad que ahora se da para ocupaciones similares en zonas distintas".
Esa medida, promovida por el PNV e incluida en su acuerdo con el PSOE para la investidura del presidente Sánchez, era una de las incluidas en el decreto de medidas laborales que la semana pasada fue tumbado en el Congreso por la estrambótica alianza de Podemos con Vox, PP y UPN.
Comentarios de nuestros suscriptores/as
¿Quieres comentar?Para ver los comentarios de nuestros suscriptores y suscriptoras, primero tienes que iniciar sesión o registrarte.