La pandemia triplica los trastornos mentales en la infancia: el 3% pensó en suicidarse

Todavía es pronto para determinar hasta qué punto la pandemia nos ha golpeado como sociedad. Las repercusiones del mazazo que ha supuesto la covid se irán vislumbrando conforme el tiempo nos permita tener algo de perspectiva.

Sí se sabe, por contra, que la pandemia ha asestado un duro golpe a nuestra ya maltrecha salud mental. Nuestros menores han sufrido de primera mano un desgaste hecho de miedos y preocupaciones sobrevenidas que han afectado a su equilibrio mental.

Según un informe de Save the Children, la pandemia ha triplicado el número de trastornos mentales y de conducta entre los menores, incluso un 3% ha tenido pensamientos suicidas a lo largo de 2021, un periodo en el que las consultas de salud mental infantojuveniles han estado saturadas.

En concreto, los trastornos mentales han aumentado del 1% al 4% en menores de entre 4 y 14 años y del 2,5 % al 7 % en el caso de los trastornos de conducta, según una encuesta realizada por la ONG a 2.000 padres y madres sobre la salud mental de sus hijos, que compara con los últimos datos oficiales disponibles de la Encuesta Nacional de Salud (ENS) de 2017.

Además, dicho informe –Crecer Saludable(mente). Un análisis sobre la salud mental y el suicidio en la infancia y la adolescencia– expone que aquellos menores que viven en hogares con rentas bajas tienen una probabilidad cuatro veces mayor de experimentar trastornos mentales y/o de conducta que los de hogares con ingresos altos.