Investigan a un empresario de Valladolid por hacer trabajar a migrantes diez horas diarias sin pagarles

La Policía ha detenido a un empresario por haber cometido presuntamente un delito contra los derechos de los trabajadores migrantes. El acusado se dedicaba a proporcionar la mano de obra para la explotación de fincas agrarias de terceros y el pasado mes de noviembre se inició una investigación contra él –llamada Operación Pampinoplas– a raíz de la denuncia de una víctima.

Según la Subdelegación del Gobierno de Valladolid, en la investigación se ha confirmado que había tres trabajadores con jornadas laborales que podrían considerarse explotación laboral. Estas condiciones suponían diez horas de trabajo diarias, todos los días de la semana, sin derecho a días libres y obligados a trabajar estando enfermos, por un salario de siete euros por hora que no recibían. 

Además, estos trabajadores –que no contaban con contrato laboral ni estaban dados de alta en la Seguridad Social– son ciudadanos extranjeros y algunos de ellos sin documentación y con familiares a su cargo que dependen económicamente de ellos.

El empresario detenido conocía "plenamente" la situación de sus "trabajadores", una situación que le generaba un "negocio muy rentable", ya que disponía de mano de obra "extremadamente barata y sin réplicas", según ha explicado la Policía.

El mismo empresario ya fue detenido el año pasado como consecuencia de una inspección laboral en La Seca (Valladolid). Fue localizado por no dar de alta en la Seguridad Social a varios trabajadores cuando era administrador de otra empresa que se dedicaba también a la explotación de servicios agrícolas.