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Menos absentismo, mayor motivación y más habilidades digitales, así son los logros de ProFuturo
El programa de educación digital de Fundación Telefónica y Fundación "la Caixa" celebra su sexto aniversario, y lo hace dando a conocer nuevas evidencias de los efectos de su intervención, que ha permitido que 24,5 millones de personas se beneficien ya de este ambicioso proyecto.
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ProFuturo, el programa de educación digital de Fundación Telefónica y Fundación "la Caixa", celebra su sexto aniversario y para celebrarlo qué mejor que dar a conocer nuevas evidencias de los positivos efectos de de su intervención en las distintas comunidades donde es una realidad.
Los seis años de implantación de ProFuturo permiten comprobar cómo un conjunto de evaluaciones e investigaciones llevadas a cabo en diferentes países durante los últimos años han contribuido, entre otros aspectos, a reducir el absentismo y el abandono escolar, a mejorar las competencias digitales tanto de los niños como de los docentes, a aumentar la motivación para ir a la escuela e incluso a incrementar el compromiso de las familias con la educación de sus hijos.
Una visión más positiva de la vida
Según reflaja un informe de 2021 realizado en Filipinas por la Fundación Ayala, el 92% de los estudiantes asegura que tiene una visión más positiva de la vida tras ser partícipes del programa ProFuturo. Pero no son los únicos datos que corroboran el éxito del programa. Otro estudio, esta vez llevado a cabo en Angola, indica que se han reducido notablemente los retrasos en la llegada de los alumnos a la escuela, lo que supone un claro indicador de que los recursos de ProFuturo aportan un destacado aliciente para el aprendizaje de los niños.
En cuanto a los efectos de ProFuturo en el proceso de aprendizaje, las investigaciones ponen en evidencia una mejora de las habilidades tecnológicas y digitales en competencias lectoras, aritméticas y de autoaprendizaje. Así lo plasma un estudio realizado en Ecuador, que muestra una relación directa entre el interés de los niños por la lectoescritura y el uso de la tablet que proporciona el programa. Los datos de otro estudio en Guatemala dicen que la inserción de la tecnología, bajo ciertas condiciones, actúa como factor motivacional para el aprendizaje en esta competencia y en muchas otras, como la aritmética, la creatividad o la expresión oral.
Mayor compromiso de padres y tutores
Igualmente hay evidencias de que el programa ProFuturo aumenta el compromiso de madres, padres y tutores con la enseñanza de sus hijos. Un estudio cualitativo encargado en 2021 a la Universidad Carlos III de Madrid para medir el impacto de ProFuturo en Zimbabue agrupa testimonios de familias que reconocen los beneficios que el programa ha llevado a sus vidas. Entre ellos, numerosos cambios positivos en la dinámica familiar. Los propios niños comienzan a ayudar a sus mayores en la utilización de herramientas digitales y los adultos aprecian la importancia de que sus hijos desarrollen habilidades tecnológicas para no quedarse atrás con respecto al resto de la sociedad.
Se han encontrado hallazgos, además, en cuanto a la mejora de las competencias docentes y de la transformación de las prácticas pedagógicas. Profesores encuestados en Angola aseguran que ahora tiene un mayor grado de familiaridad con la tecnología, y en Brasil se ha observado una mayor disposición a seguir formándose profesionalmente.
Más de 23 millones de niños y de un millón de docentes en 40 países
ProFuturo ha superado el millón de docentes formados en competencias digitales y hasta el momento ha beneficiado con su propuesta educativa, basada en la tecnología y la innovación, a 23,4 millones de niños en 40 países de Latinoamérica, el Caribe, África y Asia desde el año 2016, según los indicadores auditados por la organización a cierre de 2021.
El 14 de julio de ese año, el presidente de Fundación Telefónica, César Alierta, y el de Fundación "la Caixa", Isidro Fainé, firmaron una alianza estratégica para el desarrollo conjunto de este ambicioso proyecto, que surgió con el objetivo de facilitar una educación digital de calidad en los entornos más vulnerables del mundo y promover la igualdad de oportunidades de todos los niños. "La tecnología y la innovación educativa nos permiten dar respuesta a las necesidades de las escuelas más remotas, de los docentes con más dificultades para enseñar y de los alumnos con más barreras para acudir a clase y aprender", asegura al respecto Magdalena Brier, directora general de ProFuturo.
Orgullosos de recoger frutos
El programa se implementa en 9.300 centros educativos de lugares tan diversos como la selva amazónica de Brasil, las provincias del sur y del este de Sierra Leona o los asentamientos informales de refugiados sirios en el valle de la Bekaa, en el Líbano.
"Estamos orgullosos de ver cómo nuestro programa está recogiendo los frutos del trabajo llevado a cabo en estos seis años de trayectoria. Cada indicio de mejora conseguida en la calidad educativa y en las perspectivas de futuro de los niños nos impulsa a seguir trabajando para que la educación digital llegue más lejos y a más personas", asegura Magdalena Brier.
Nueva solución tecnológica y más innovación educativa
ProFuturo cumple seis años también en pleno proceso de transformación e innovación. Ha completado recientemente el diseño y la definición de su nueva solución tecnológica, un nuevo sistema de gestión del aprendizaje o LMS (Learning Management System) que está disponible en código abierto e incluye los componentes más vanguardistas de la educación digital.
A través de esta plataforma, el programa pone a disposición de docentes y alumnos más de 160 cursos y 2.800 horas de oferta formativa en distintos idiomas de manera gratuita.
Mejoras constantes
Entre estos recursos, destacan las Matemáticas ProFuturo, un aplicativo recién lanzado en abierto que, a partir de la inteligencia artificial, promueve el desarrollo de la competencia matemáticas en niños de 8 a 12 años.
ProFuturo, además, está avanzando en la aplicación de la analítica de datos a todo su ecosistema digital. Se trata de una línea de trabajo estratégica para su nuevo sistema de monitoreo y evaluación, que comenzó a implementarse en 2021 con el objetivo de perfeccionar el seguimiento del programa en cada contexto de intervención y poder tomar decisiones de mejora.