El PP critica la "excepción ibérica" que permitirá bajar el precio de la luz: "Es una demostración de debilidad"

Al Partido Popular no le gusta la "excepción ibérica" que Pedro Sánchez le arrancó al Consejo Europeo el pasado 25 de marzo. "La excepción ibérica es una demostración de la debilidad como país", le ha espetado Cuca Gamarra al presidente del Gobierno este miércoles en el Congreso. La portavoz y coordinadora general del PP le reprocha a Sánchez que dijera "que iba a liderar una política energética común y lo que nos trae es una excepcionalidad porque queda fuera del acuerdo". El acuerdo alcanzado por los líderes europeos permitirá a España y Portugal adoptar medidas excepcionales para rebajar los precios de la energía. Los dos países presentarán las medidas esta semana a la Comisión Europeo para su aprobación definitiva.

El presidente Pedro Sánchez ha intervenido en el Congreso de los Diputados para explicar el acuerdo alcanzado en Europa y el resto de medidas del Plan de recuperación económica que aprobó este martes el Consejo de Ministros. Inmediatamente después ha tomado la palabra la portavoz del Partido Popular para criticar el paquete de medidas desplegado por el Gobierno, al que se ha referido como "Plan primavera". "Más burocracia, improvisación y de momento que le vayan financiando los más débiles", reflexionó Cuca Gamarra.

Una escalada de reproches en la que los populares criticaron que las ayudas de 6.000 millones son "tardías", que los "alivios fiscales" no contribuyen a contener la inflación como la bajada directa de impuestos que propone el PP o que Sánchez todavía tendrá que recibir el visto bueno de la Comisión Europea para topar el precio del megavatio. "Quería desacoplar el gas pero el único que vive desacoplado de la realidad es usted", le espetó la portavoz  del PP a Sánchez desde la tribuna. 

Este no fue el único chascarrillo de Cuca Gamarra en el hemiciclo. "La señora Calviño es a las previsiones económicas lo que Fernando Simón a las previsiones sanitarias", dijo pocos minutos después de tomar la palabra. El PP, que en tres días tendrá un nuevo presidente, Alberto Núñez Feijóo, ha regresado al tono bronco y de confrontación contra el Ejecutivo. "En España, por desgracia, lo que se repite es que el PSOE arruina a las clases trabajadores una vez cada diez años y detrás llega el PP para arreglar sus destrozos".

El "desprecio" de Sánchez

La otra cuestión importante de la que Pedro Sánchez daba cuentas en el Congreso era el giro en la postura sobre el Sáhara. El presidente del Gobierno negó que se tratase de un cambio de postura. "Que ahora trate de justificar que no ha sido un cambio es faltar al respeto a los grupos de esta cámara y al conjunto de los españoles", le espetó Cuca Gamarra. La portavoz del PP aseguró que la cuestión del Sáhara es "uno de los escasos temas" en la que todas las fuerzas políticas "compartíamos la misma posición".  Para el Partido Popular la forma en la que Sánchez cedió ante Rabat "escenifica el desprecio" que Sánchez "siente y practica hacia este Parlamento".