EXHUMACIÓN DEL DICTADOREl nieto de Pinochet, indignado por la exhumación de Franco: “Lo del Gobierno español raya la brujería”

Durante más de cuatro décadas, el Valle de los Caídos ha captado la atención de nostálgicos del franquismo de aquí, allá e incluso más allá. Algunos de los que visitaron la tumba de honor del dictador Francisco Franco venían del otro lado del Océano.

De todos esos visitantes, hubo uno que pisó dos veces Cuelgamuros y se acordó de su abuelo, también dictador. El nombre del turista era Augusto Pinochet Molina. El nombre de su abuelo dictador, Augusto Pinochet Ugarte.

Pinochet Molina, ex capitán del Ejército, jamás ha ocultado su devoción por la figura de su antepasado. No lo hizo ni siquiera cuando llevaba uniforme: en diciembre de 2006, el Gobierno chileno liderado entonces por Michelle Bachelet (hija de una víctima de la dictadura pinochetista) expulsó al nieto de Pinochet de las Fuerzas Armadas por reivindicar el golpe de estado de 1973 durante el funeral del dictador.

“Estoy al tanto del proceso de exhumación de los restos mortales del generalísimo Francisco Franco”, señala Pinochet Molina a Público. “Me parece una decisión muy lamentable por parte del gobierno español, y que raya con cosas como la necromancia y la brujería”, apunta desde Chile, donde estos días se registra una dura represión que ya ha provocado cerca de una veintena de muertes.

Pocas horas después de que en España se produjera el traslado de los restos de Franco al cementerio de Mingorrubio, el nieto de Pinochet recordaba sus visitas a Cuelgamuros. “He tenido la fortuna de estar en dos ocasiones en el hermoso monumento del Valle de los Caídos, y siempre me pareció algo muy noble que enterrasen a Franco en ese lugar”, afirma.

"Caballero de Honor"

Una de las visitas de Pinochet Molina a España se produjo en julio de 2012, cuando fue invitado por la Fundación Nacional Francisco Franco (FNFF) al acto de ese año por el aniversario del golpe de estado franquista. En aquella ocasión, el ex capitán recibió el título póstumo de “Caballero de Honor” que la Fundación Franco destinó al ya fallecido dictador chileno.

Tras conocer el proceso de exhumación de Franco, el nieto de Pinochet destaca que “no existe ningún paralelismo” con lo ocurrido con los restos de su abuelo, los cuales “fueron incinerados y sus cenizas depositadas en una bóveda ubicada en una capilla que se encuentra en una parcela retirada de la ciudad y es privada”.