La luna de miel de los reyes Felipe VI y Letizia fue digna de borbones. Jordania, Camboya, Fiji, Samoa, EEUU y México. Esa fue la ruta elegida por los entonces príncipes. Hasta ahí, todo correcto. El problema, como suele ocurrir en estos casos, tiene que ver con la factura. Y no tanto por el medio millón de euros que costó la lujosa ruta, sino por quién la pagó. Así lo ha evidenciado este domingo una información de The Telegraph, que señala que el viaje nupcial fue abonado a mitades: Juan Carlos I, entonces rey, y Josep Cusí, un empresario poco conocido que se ocupó de cubrir más del 50% de los gastos, 269.000 dólares. Pero, ¿quién es Cusí?

Cusí, empresario de 86 años, está al frente de Navilot S.L., empresa con la que pagó el montante del viaje de bodas de los reyes. Su figura, que ha pasado desapercibida a nivel mediático, es cercana a Juan Carlos I. Ambos están unidos por la pasión del mar, en tanto que desde los años setenta han sido socios de navegación y han ganado, según The Telegraph, cerca de 12 títulos nacionales y alguna que otra regata.

El empresario adoptó un perfil bajo, a pesar de su cercanía y su estrecha confianza con el borbón. Entre las escasas informaciones del pasado, destaca una sacada del archivo de El País. En 1984, Cusí fue denunciado por Miguel Ángel Roselló, periodista de La Vanguardia, que le acusaba de haberle agredido ¿El motivo? El comunicador había publicado una información en la que detallaba el precio por el que el socio del rey había vendido uno de sus barcos.

"José Cusí, molesto por una información en la que se reseñaba la cifra que iba a percibir por la venta del barco al italiano George Falk, agredió al periodista en Porto Cervo (Cerdeña), en el transcurso de una fiesta de entrega de premios a la que Roselló se había desplazado en misión informativa. Cusí, en presencia de 80 o 90 personas, se abalanzó sobre el informador y, sin mediar palabra, le derribó de un par de puñetazos y una vez en el suelo le propinó varias patadas", expone el archivo digital de El País.

Otra de las escasas referencias que se encuentran sobre él es el vínculo indirecto que tiene con Jordi Pujol Ferrusola, el hijo del expresidente de la Generalitat que está siendo investigado por la Justicia por blanqueo de dinero. Según adelanta el propio The Telegraph, la empresa que preside desde 1989, fue creada por Javier Villalba Catalá, un reconocido abogado que ha formado parte del consejo de dirección de numerosas compañías, algunas de ellas, vinculadas a Ferrusola.