La enconada situación en la frontera entre Bielorrusia y Polonia no da tregua y se suceden las reacciones por parte de los organismos internacionales. La concentración de más de 2.000 migrantes, en su mayoría kurdos, frente a la alambrada polaca ha hecho que el Gobierno de este país movilice a unos 12.000 soldados para aplacar lo que han tildado desde Varsovia de "amenaza" que podría derivar en una "escalada violenta".

La OTAN no ha dudado en solidarizarse con Polonia calificando de "inaceptable" el uso de migrantes por parte de Bielorrusia. Es más, a través de un mensaje de Twitter el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, se refirió a la "táctica híbrida de Bielorrusia en la utilización de migrantes" como "inadmisible".

"He hablado con Andrzej Duda sobre la grave situación en la frontera de Polonia. El uso de migrantes por parte de Bielorrusia como táctica híbrida es inaceptable. La OTAN se solidariza con Polonia y con todos nuestros aliados en la región", ha denunciado Stoltenberg a través de la mencionada red social.

Desde la Comisión Europea, por su parte, se pide a Polonia que sea más "transparente" en materia de protección fronteriza, y le instan a aceptar la presencia de agentes de agentes de Frontex, tal y como hace Lituania. 

La comisaria de Interior, Ylva Johansson, ha querido hacer hincapié en las "diferencias" entre Lituania y Polonia a la hora de responder a lo que, desde la Unión Europea, se considera una "guerra híbrida". 

Mientras, el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, prometió el apoyo de la Unión Europea (UE) a los países bálticos y a Polonia ante el "brutal ataque híbrido" procedente de Bielorrusia a las fronteras exteriores comunitarias.

Lituania "ha contactado con la UE, ha sido transparente y ha aceptado la ayuda de Frontex", algo lógico según considera el Ejecutivo comunitario, teniendo en cuenta que la protección de las fronteras exteriores de la UE es "un trabajo europeo". 

Así, según Johansson, esa debería ser la manera en que Polonia afronte esta crisis fronteriza. "Sería bueno que hubiera más agentes en Polonia. Hace falta transparencia, saber lo que se está haciendo ahí", ha insistido Johansson. Además, Lituania ya ha declarado el estado de emergencia en sus regiones fronterizas y en los campamentos de migrantes.

Sin ir más lejos, el presidente del Parlamento Europeo, David Sassoli, ha reiterado este martes a Polonia la ayuda de Frontex para hacer frente a la crisis. Una crisis que calificado de "juegos de poder político" por parte del régimen del presidente bielorruso, Alexandr Lukashenko.

A través de un mensaje de Twitter, Sassoli se ha mostrado "alarmado" por la situación y no ha dudado en pedir a Lukashenko que deje de "explotar" a los migrantes: "Pedimos a Polonia que acepte la oferta de la UE para ayudar a las personas vulnerables de forma ordenada y evitar una nueva escalada".

Lukashenko acusa a "mafias" de la crisis migratoria

Ante tal cantidad de reacciones internacionales, el presidente de Bielorrusia, Alexandr Lukashenko, ha acusado a "estructuras mafiosas" europeas de la actual crisis migratoria. "Los ponen en aviones, que aterrizan aquí, los cogen, los llevan a la frontera, les ayudan a cruzar y allí ya los reciben los suyos: polacos, alemanes, ucranianos. Y todo a cambio de dinero", ha afirmado en una entrevista.

Del mismo modo, el presidente bielorruso ha acusado a las mafias de garantizar el tránsito con destino a Alemania y Francia. "No son pobres los que van. Y si lo son, es porque les han quitado el dinero. Esa cadena la tenemos totalmente controlada".

Así, aseguró que este tipo de organizaciones son las que conducen a los migrantes hacia la frontera con Polonia, aunque en las imágenes divulgadas por los medios locales se podía ver a efectivos de las fuerzas de seguridad bielorrusas acompañando el lunes a una columna con varios miles de migrantes por una autopista.