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La ONU pide una tregua entre Hizbulá e Israel para evitar una escalada a nivel regional

El ex primer ministro israelí ha pedido la dimisión del Gobierno de Israel, mientras que Egipto ruega una tregua entre el país hebreo y el movimiento libanés.

23 de agosto de 2023. Una densa columna de humo en la ciudad libanesa de Khiam, a 23 de agosto de 2024.
Una densa columna de humo en la ciudad libanesa de Khiam, a 23 de agosto de 2024. Marwan Naamani / Europa Press

La intensificación de ataques entre Israel y el movimiento libanés Hizbulá han provocado que la ONU, Egipto y el ex primer ministro israelí, Ehud Olmert, pidan una tregua y se continúen con las negociaciones para conseguir frenar la ocupación israelí en Gaza.

Estas exigencias vienen a raíz de los bombardeos causados en la madrugada de este domingo, donde al menos tres personas perdieron la vida, una de ellas era combatiente de una formación armada. Y es que Hizbulá lanzó este domingo su "respuesta inicial" a la muerte de su máximo comandante, Fuad Shukr, provocada por los israelíes.

Mientras, el portavoz del Ejército israelí aseguró que la Fuerza Aérea utilizó unos cien aviones para atacar miles de lanzacohetes de Hizbulá, con el objetivo de "frustrar un inminente ataque masivo". Es por esto, que este domingo se ha pedido una tregua por parte de la ONU y Egipto. Además, Netanyahu ha recibido críticas del ex primer ministro israelí, Ehud Olmert.

La ONU y Cascos Azules piden una tregua

La coordinadora especial de la ONU para el Líbano, Jeanine Hennis-Plasschaert, y el comandante de los Cascos Azules en el Líbano, el general español Aroldo Lázaro, instaron en un comunicado conjunto tanto a Israel y a Hizbulá "cesar el fuego y abstenerse de nuevas acciones que intensifiquen la violencia".

La misión de la ONU en el Líbano y los Cascos Azules urgieron este domingo a Israel y al grupo chií libanés Hizbulá que acuerden una tregua y se abstengan de "nuevas acciones que intensifiquen la violencia", después del intercambio de ataques a gran escala de ambos bandos.

"El único camino sostenible para avanzar es el retorno al cese de las hostilidades, seguido de la aplicación de la resolución 1701 del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas", continuó la nota, que afirmó que ambos responsables seguirán "manteniendo contactos para instar firmemente a que haya una desescalada".

Ehud Olmert pide la dimisión del Gobierno israelí

El ex primer ministro israelí Ehud Olmert acusó este domingo al actual mandatario israelí de "torpedear" las negociaciones de alto el fuego en la Franja de Gaza, lo que dijo aboca al país hacia una guerra integral en la región.

Olmert asegura que Netanyahu no busca el retorno de los rehenes, sino alargar una guerra que podría degenerar en una escalada de violencia contra el grupo chií Hizbulá e Irán. Sostiene que la comunidad internacional comienza a impacientarse con Israel, asegurando que "cuanto más tarde en llegar el acuerdo, más posible es el estallido" con territorios como Yemen o las milicias iraníes en Siria o Irak.

El ex primer ministro, pidió la renuncia a los principales cargos del aparato de Seguridad y de Defensa israelíes ya que, a su parecer, no pueden hacer su trabajo junto a Netanyahu ni cerrar una tregua.

Egipto urge a mantener estabilidad en Líbano

En el momento que se celebra en El Cairo una serie de reuniones con negociadores para lograr una tregua entre Israel y Hamás, el Gobierno egipcio urgió a todas las partes a mantener una estabilidad ante la oleada de ataques entre Israel e Hizbulá.

Egipto teme que esta situación acabe con "inestabilidad global"

El Ministerio de Exteriores señala su preocupación por la escalada del frente libanés e insiste en un "alto al fuego global" para que llegue el fin de la guerra a Gaza. También hizo un llamamiento a los actores internacionales para unir fuerzas y "reducir la tensión". Pidió respeto por la soberanía del Líbano  espera que se pueda evitar el peligro de que "la zona resbale hacia un estado de inestabilidad global".

Las consecuencias hasta el momento

De momento, la violencia en la frontera de Israel y Líbano es la más grave desde el conflicto de 2006 y se ha cobrado la vida de más de 630 personas, la mayoría de lado libanés y en las filas de Hizbulá, que ha confirmado unas 400 bajas.

Los ataques del Ejército israelí también han causado la muerte de unos 125 civiles libaneses. Y en su bando han muerto un total de 49 personas, incluidos 12 menores a finales de julio.

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