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Arabia SaudíEl heredero saudí Bin Salman neutraliza a sus rivales y prepara una sucesión rápida
La detención de prominentes príncipes a partir del pasado viernes ha agitado Arabia Saudí. Una vez más, el príncipe heredero Mohammad bin Salman, el hombre fuerte en el reino, ha adoptado una decisión controvertida, esta vez con la intención de allanar el
Eugenio García Gascón
Jerusalén-
El príncipe heredero saudí, Mohammad bin Salman (MBS), ha neutralizado a sus principales rivales de cara a la sucesión del trono en una operación expeditiva en la que ha detenido a distintos príncipes que podrían hacerle sombra en un futuro próximo, preparando una sucesión rápida de su padre, el rey Salman, que a sus 84 sufre de demencia senil.
MBS, de 34 años, se ha convertido una vez más en centro de atención al ordenar el arresto de su tío Ahmed bin Abdul Aziz, hermano menor del rey Salman, y de su primo Mohammad bin Nayef, quien hasta 2017 ostentó el título de príncipe heredero, así como de una larga lista de príncipes que desde el viernes se encuentran confinados en distintas villas de Riad.
La primera noticia sobre las detenciones la publicó la página en árabe de Aljazeera el viernes por la noche. Unos minutos después, The Wall Street Journal aportó detalles adicionales, y desde entonces la prensa árabe y sobre todo la prensa anglosajona han ido ampliando la noticia, pero debido al hermetismo que reina en Arabia Saudí algunos datos aportados son contradictorios.
Básicamente habría dos móviles que explicarían las detenciones. El primero que se publicó es que la operación tenía por objetivo abortar un golpe de estado contra MBS, no contra el rey. El segundo es que MBS quiere proceder con su proclamación como rey inmediatamente, en todo caso antes de la cumbre del G20 que tendrá lugar en Riad en noviembre, y que los detenidos se oponen a que el joven y ambicioso príncipe se convierta en monarca.
Según esta última versión, Ahmed bin Abdul Aziz habría sido convocado por su hermano el rey para informarle de que ha adoptado la decisión de que su hijo MBS sea proclamado rey cuanto antes, y Ahmed bin Abdel Aziz se habría negado. Le habría contestado al rey que él no quiere ser rey pero que se opone a la elección de MBS por considerar que durante los últimos años ha tomado muchas decisiones equivocadas que han redundado en perjuicio del país.
Ahmed bin Abdul Aziz es uno de los príncipes más respetados e influyentes. Recientemente regresó a Arabia Saudí después de un breve periodo de exilio voluntario en el Reino Unido, donde en una ocasión dijo públicamente a los grupos opositores que deberían dirigir sus críticas contra MBS y no contra el conjunto de la familia real. Regresó a Riad después de recibir garantías de Estados Unidos de que no sería represaliado.
Además, Ahmed bin Abdul Aziz preside el consejo que debe confirmar nominalmente la coronación del próximo rey. Se trata de un consejo integrado por un grupo de príncipes destacados. Sin embargo, desoyendo al rey, Ahmed bin Abdul Aziz habría insistido en que se opone a la confirmación de MBS, y por este motivo se le habría detenido.
MBS ha cometido numerosos errores durante los años que ha dirigido el país, especialmente desde que Salman lo designó heredero en 2017. La terrible guerra de Yemen, a la que no se ve fin, la represión de los disidentes, el bloqueo de Qatar y el asesinato del periodista Jamal Khashoggi en 2018 constituyen los más visibles. Además, las “reformas culturales” del país no han sido bien recibidas en amplios sectores y la economía no está creciendo al ritmo previsto. En este contexto adverso, MBS querría asegurarse el trono.
Otra consideración revelada por algunos medios anglosajones es que MBS teme la posibilidad de que Donald Trump no sea reelegido en noviembre, de manera que tiene que acelerar su acceso a la corona. Sus principales aliados, el llamado eje del bien integrado por Benjamín Netanyahu y el propio Trump, podrían caer en poco tiempo y si esto ocurre MBS se hallaría sin valedores.
La masiva detención de príncipes recuerda a una operación similar que MBS llevó a cabo en 2017, en la que también se arrestó a multimillonarios hombres de negocios, y que entonces se justificó por la lucha contra la corrupción. Esta operación de ahora es de mayor calado y marcadamente más política. Si entonces los detenidos fueron confinados en un hotel de lujo de Riad, esta vez, al menos a una parte de ellos, se les ha encerrado en villas y, según The Washington Post, se les está permitiendo hablar por teléfono con sus familias. Según The Wall Street Journal, algunos han sido liberados después del correspondiente interrogatorio.
MBS quiere acelerar su coronación porque cree que si se produce mientras su padre sigue vivo tendrá más legitimidad y porque piensa que si su padre muere antes podrían surgir problemas, especialmente si el eje del bien, Netanyahu y Trump, cae antes de que muera su padre. El rey Salman ha aparecido en público en los últimos días con el fin de mostrar al país que, a pesar de que se le ha diagnosticado demencia senil, sigue a cargo de las cuestiones de estado, si bien quien lleva los asuntos importantes es MBS.
Según The Guardian, el propio rey habría firmado las órdenes de arresto contra los príncipes, un acto inusual contra dos de los miembros más prominentes de la familia real. Ahmed bin Abdul Aziz es el único hermano de padre y madre en vida que tiene el rey Salman, y en varias ocasiones se le ha nombrado como posible candidato a la sucesión, una ambición que el príncipe habría negado.
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