Este artículo se publicó hace 16 años.
La policía colombiana ocupa las propiedades de "Macaco" para reparar a sus víctimas
Agentes de la Policía y funcionarios de la Fiscalía de Colombia iniciaron hoy la ocupación de decenas de propiedades del jefe paramilitar y presunto narcotraficante Carlos Mario Jiménez, alias "Macaco", extraditado a Estados Unidos.
Los agentes y cargos de la Unidad de Lavado de Activos y Extinción de Dominio de la Fiscalía empezaron la operación para intervenir esos bienes que servirán para reparar a las víctimas de quien fue uno de los principales jefes paramilitares, según fuentes judiciales.
Desde la madrugada, poco después de que "Macaco" fuese enviado a responder ante autoridades de EE.UU. por cargos relacionados con tráfico de drogas, lavado de dinero y financiación al terrorismo, se inició la operación, especialmente en el departamento del Valle del Cauca, suroeste.
En ese territorio, y en Cali, la capital, Jiménez concentraba la mayor parte de sus propiedades.
Las autoridades han intervenido en la operación de hoy un total de 25 apartamentos en Cali, 23 vehículos y un barco, además 2.700 dólares y 10 millones de pesos en efectivo (algo más de 4.000 dólares).
También fueron intervenidos 14 locales y establecimientos comerciales, y según las fuentes, el valor de esas ocupaciones puede superar los 20 millones de dólares.
Las propiedades y bienes estaban a nombre del propio "Macaco" y se encontraban en poder de familiares y de testaferros.
Las fuentes señalaron que las operaciones siguen, especialmente en Cali, aunque en distintas regiones colombianas se encuentran bienes y propiedades de quien fue jefe máximo del Bloque Central Bolívar (BCB), una de las principales facciones de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC).
Jiménez, quien perdió los beneficios de la Ley de Justicia y Paz, marco legal de la desmovilización paramilitar, porque, según el Gobierno, desde la cárcel continuaba en el delito, había entregado hace dos años bienes por mas de 55 millones de dólares para la reparación de víctimas.
"Macaco" formó parte del equipo negociador de las AUC que acordó con el Gobierno del presidente Álvaro Uribe la desmovilización de la principal asociación paramilitar de la extrema derecha por la cual más de 31.000 combatientes se entregaron entre 2003 y 2007.
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