Patino, Coixet y Luna llevan a Chinael cine del futuro

Marchando una de cifras mareantes: 520 hectáreas. 70 millones de visitantes. Estos datos se oyeron ayer en la presentación del pabellón español de la Expo Shangai 2010, "la mayor exposición universal de la historia", según Javier Conde, presidente de la Sociedad Estatal de Exposiciones Internacionales (SEEI) y comisario de un pabellón de 30 millones de euros. ¿Burro grande, ande o no ande?

Al parecer, en China, por causas estratégicas, todo tiene que ser a lo bestia. "España es uno de los países punteros con menor presencia allí. Tenemos que llamar la atención", dijo Conde sobre un pabellón, diseñado por Benedetta Tagliablue, de 7.000 mil metros cuadrados.

De llenar de contenido semejante burro, cuyos rebuznos deberán oírse más allá del Yangtsé, se encargarán Basilio Martín Patino, Bigas Luna e Isabel Coixet, que recorrerán la memoria de nuestras ciudades: de la vida en el campo, a la ciudad del futuro, pasando por las urbes de nuestros padres.

A nadie puede extrañarle ya que un cineasta se encargue de una exposición. "Han surgido nuevas maneras de narrar", contó Coixet. "No habrá sólo cine. Vídeo instalaciones, conciertos, arte plástico, aquí se puede mezclar todo", explicó el multidisciplinar Bigas Luna.

Curiosamente, el más entusiasta fue el veterano Martín Patino, que estaba como un niño con zapatos nuevos. "Pensé que me había retirado, pero surgen proyectos que me estimulan, alejados del cine lineal de toda la vida. Nos permiten salirnos del cliché donde nos habían metido, el de la pantalla única. Cambian los formatos, y también las maneras de ser libres", zanjó.