Este artículo se publicó hace 14 años.
Francia usó a soldados como cobayas nucleares, según un diario
Francia expuso deliberadamente a sus soldados a explosiones nucleares en Argelia en los años 60 para estudiar el efecto de las radiaciones en los humanos, informó el martes un periódico, que citó documentos confidenciales.
El Gobierno francés prometió el año pasado compensar a las víctimas de las pruebas nucleares llevadas a cabo en Argelia entre 1960 y 1966, reconociendo la relación entre las explosiones y las enfermedades sufridas por algunos veteranos, como cáncer.
Aunque el Gobierno ha dicho que las pruebas fueron realizadas de la forma más segura posible, el periódico Le Parisien citó un informe oficial de Defensa de ese período que recogía que el Ejército envió deliberadamente a sus soldados a maniobras arriesgadas el 25 de abril de 1961.
Uno de los objetivos era "estudiar el efecto físico y psicológico de las armas atómicas en los humanos, de cara a obtener los elementos necesarios para la preparación física y el entrenamiento moral del combatiente moderno", dijo el informe recogido por Le Parisien.
El ministro de Defensa, Hervé Morin, dijo al periódico que no estaba al tanto del informe. "Las dosis (radiactivas) recibidas durante las pruebas fueron muy bajas", dijo.
Algunos veteranos que trabajaron en los experimentos en Argelia, y en las pruebas posteriores en los atolones de la Polinesia francesa, han dicho que recibieron órdenes de permanecer tendidos y con los ojos cubiertos durante las explosiones, vistiendo sólo pantalón corto y camiseta.
Le Parisien dijo que aproximadamente 300 soldados participaron en la prueba de 1961, y las patrullas recibieron la orden de entrar en el área afectada justo después de la explosión y dirigirse al lugar donde había sido activado el dispositivo.
"Una patrulla de vehículos todo terreno recibió la orden de llevar a cabo una incursión sobre el punto cero para estudiar la posibilidad de un ataque en una zona contaminada", dijo el documento, citado por el periódico.
Francia llevó a cabo pruebas nucleares en la Polinesia francesa entre 1966 y 1996. Varios veteranos han dicho que les dijeron que se dirigieran de inmediato en barco a las zonas afectadas tras la explosión para examinar el impacto.
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