Fallece Eduardo García de Enterría, jurista y Príncipe de Asturias

El abogado y jurista cántabro Eduardo García de Enterría falleció ayer por la tarde en su domicilio de Madrid a los 90 años, según fuentes de su despacho profesional. García Enterría, nacido en Ramales de la Victoria (Santander) el 27 de abril de 1923, será enterrado en la localidad de Potes, en la comarca cántabra de Liébana.

Catedrático emérito y académico de la Real Academia de la Lengua Española, formó parte de la comisión de expertos encargada de revisar el marco de competencias entre el Tribunal Constitucional y el Tribunal Supremo. Cursó estudios de Derecho en las Universidades de Barcelona y Madrid. En la madrileña Universidad Complutense obtuvo el Premio extraordinario de Licenciatura en 1946 y de doctorado en 1952 por la tesis El dogma de la reversión de concesiones.

Fue becado por la Fundación Juan March y en 1947 ingresó en el Cuerpo de Letrados del Consejo de Estado, donde ejerció como auditor hasta 1963.

Comenzó su tarea docente en 1952 como profesor adjunto por oposición de Derecho Administrativo en la Facultad de Derecho de la Universidad de Madrid. Más tarde, en 1957, obtuvo la cátedra de Derecho Administrativo en la Facultad de Derecho de la Universidad de Valladolid. En 1962, ganó, por oposición, la primera cátedra de Derecho Administrativo de la Facultad de Derecho de la Universidad Central de Madrid (hoy Universidad Complutense), donde dirigió el departamento de Derecho Administrativo. Fue catedrático emérito de esta Universidad.

Académico de número de la Real de Jurisprudencia y Legislación, leyó su discurso de ingreso en 1970, año en que fue elegido vocal de la Comisión General de Codificación. Dedicado a la tarea docente y a la investigación del Derecho, García de Enterría rechazó en dos ocasiones la titularidad del Ministerio de Educación, una en 1976, cuando se lo ofreció Arias Navarro y otra siendo presidente Adolfo Suárez.

Fue elegido en 1978 juez del Tribunal Europeo de Derechos Humanos del Consejo de Europa por un período de nueve años. En 1981 fue designado por el Gobierno para dirigir y coordinar la comisión de expertos encargada de redactar los dictámenes económicos de las comunidades autónomas. En 1984 fue galardonado con el premio Príncipe de Asturias de Ciencias Sociales. Un año después, en 1985, se vio implicado en un supuesto caso de evasión de capitales, que fue sobreseído por la Audiencia Nacional por falta de pruebas.

Fundador junto con Fuentes Quintana de la Escuela Libre de Derecho y Economía de Madrid, García Enterría fue presidente de la Federación Internacional de Derecho Europeo (FIDE) y participó en el Comité Louis encargado de redactar un proyecto de disposiciones para la Unión Económica y Monetaria Europea, que se publicó en Bruselas en 1989. Fue investido doctor honoris causa por la Universidad parisiense de La Sorbona, por la Universidad de Bolonia, la Universidad de Valladolid y la Universidad de Cantabria, entre otras.

Experto en legislación comunitaria, García de Enterría fue uno de los seis juristas que integró la Comisión encargada de redactar el proyecto de Constitución Europea. En 1993 fue elegido académico de la Real de la Lengua Española, donde ingresó oficialmente para ocupar el sillón U mayúscula en 1994.

Desde 1996 fue miembro del Grupo de Expertos de Previsión Económica de la Unión Europea, formado por los Siete Sabios, y consejero académico de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo de Santander (UIMP). García de Enterría participó en la redacción de diversos proyectos legislativos, así como de numerosos libros y artículos especializados sobre Derecho Administrativo. Desde 2002 formó parte de la comisión de expertos encargada de revisar el marco de competencias entre el Tribunal Constitucional y el Tribunal Supremo.

Su faceta literaria está concentrada en su obra La poesía de Borges y otros ensayos. En 1969 recibió la Gran Cruz de Alfonso X el Sabio. Estaba casado con Amparo Lorenzo-Vázquez y tienen cinco hijos.