La crisis económica pudo aumentar el número de suicidios entre los vascos

La evolución de la situación económica pudo llevar al suicidio a algunos de los 176 vascos que el año pasado se quitaron la vida, si bien en la mayoría de las casos estas personas suelen presentar patologías psiquiátricas previas, según ha analizado el Instituto Vasco de Medicina Legal.

El director del citado instituto, Carlos Cubero, ha explicado, en la presentación de la memoria de la actividad de la citada entidad, que desde su puesta en marcha, en 2002, el número de personas que anualmente se ha quitado la vida se ido reduciendo en el País Vasco hasta que, el pasado año, se incrementó un 40 por ciento respecto al 2006.

Según ha considerado Cubero, en los últimos años se ha constatado que el actual ritmo de vida ha provocado que cada vez más personas que en el País Vasco padecen patologías psiquiátricas como la depresión y la ansiedad pueden derivar en deseos de destrucción.

Cubero ha dicho que "para algunas de esas personas", la evolución socio económica y sociolaboral y, en general, afrontar la situación personal ante el déficit económico, les genera un estrés imposible de superar y les aboca al suicidio.

Además, ha analizado que en la actualidad "es muy difícil" prevenir una muerte de este tipo porque las personas con esas enfermedades ya no están ingresadas en centros, sino que "se tiende a que vivan en familia y hagan vida normal", por lo que en muchas ocasiones los suicidas logran su propósito fatal.

La Memoria del Instituto Vasco de Medicina Legal, presentada por el consejero de Justicia, Joseba Azkarraga, ha revelado que los forenses que ejercen en esta comunidad autónoma realizaron el año pasado 1.024 autopsias, de las que la mitad se debieron a muertes violentas, un total de 514, y de ellas la primera causa de fallecimiento fue el suicidio.

También se registraron 167 "muertes casuales", entre las que se contabilizan las debidas a una caída o al consumo de drogas y, en tercer lugar, con 125 fallecidos, aparecen los accidentes de tráfico.

Los forenses detallaron que las autopsias realizadas a los cadáveres de los 63 conductores fallecidos confirmaron que diez de ellos conducían tras haber bebido alcohol y que nueve habían tomado drogas o psicofármacos.

Además, según ese estudio, en Euskadi en 2007 murieron 37 trabajadores en accidente laboral, la mayoría de ellos por caídas en altura o aplastamientos, y se produjeron 9 homicidios, un 30 por ciento más que el año anterior, causados casi todos por arma blanca y en la comarca de Bilbao.

La evolución de los datos sobre la actividad que realizan los expertos en medicina legal desde hace cinco años describe, según ha destacado Azkarraga, un incremento de un 67 por ciento de los reconocimientos a víctimas de violencia de género y casi un 20 por ciento los reconocimientos tras agresiones sexuales.

En general, en los últimos años en Euskadi se han reducido las muertes traumáticas por accidente de tráfico (un 33,33 por ciento), las debidas a la siniestralidad laboral (un 4,4 por ciento) y por homicidio (un 4,7 por ciento).

El consejero ha asegurado que el balance de la actividad del Instituto Vasco de Medicina Legal "confirma la consolidación definitiva de la organización de la medicina forense" al servicio de los órganos judiciales y de los ciudadanos, al tiempo que este organismo ha "conseguido mantener la independencia en sus actuaciones y la elevado la preparación de sus integrantes".