La primavera es la mejor época del año para hacer una mini escapada a cualquier punto de Catalunya, desde el Delta de l'Ebre hasta los Pirineos, pasando por la Costa Daurada, la Costa Brava o Lleida.

Hay miles de actividades que se pueden realizar en 24 horas, y todas ellas, antes de que lleguen los turistas en masa y el calor sea tan asfixiante que sólo se pueda salir a partir de las ocho de la tarde. Aunque ya se sabe que en primavera puede llover de forma intermitente y en cualquier momento del día.

Os dejamos una recopilación de rutas, lugares desconocidos y propuestas culturales y de ocio para aprovechar las últimas semanas de primavera y disfrutar de las temperaturas agradables antes de la llegada del verano.

Primer chapuzón de la temporada en el Delta de l’Ebre

El Delta de l'Ebre siempre ha sido el "gran desconocido" de los amantes de la playa y el sol. Además de sus infinitos campos de arroz y los parajes naturales de gran valor paisajístico, tiene las playas más desérticas -en todos los sentidos- de Catalunya. Las aguas cálidas y calmadas -que no cristalinas, por su cercanía a la desembocadura del río Ebro- de Riumar, la Marquesa o el Trabucador nos invitan a disfrutar del primer chapuzón de la temporada.

También es una zona ideal para practicar las actividades acuáticas más atrevidas, como windsurf, surf, pádel surf, kitesurf, wingfoil o kayak porque son playas con poca profundidad y donde suele hacer viento.

Ribes de Freser desde la altura

Si te gusta la escalada, pero todavía no te has atrevido con la roca, la primavera también es la mejor época del año para hacer vías ferratas. En Catalunya hay cientos de ellas y repartidas por todo el territorio, desde las zonas más rocosas de la Costa Brava a las montañas de los Pirineos.

De todas ellas, te recomendamos la vía ferrata de Ribes de Freser (Girona). Es una de las poblaciones más populares del Ripollès, ya que se encuentra en los pies del monte Puigmal y es la puerta de entrada a la Vall de Núria, aunque seguro que nunca la has visto desde la altura.

Se trata de un itinerario que permite llegar con seguridad a zonas de difícil acceso a través del granófiro de Ribes de Freser, de origen volcánico y único en Catalunya. El recorrido está muy bien indicado y hay un cable de línea de vida que transmite seguridad. Eso sí, necesitas mosquetones, arnés y casco. No es una vía ferrata fácil, sobre todo para los más principiantes, a los que recomendamos ir con un guía.

Viaja al pasado en Lleida

La actividad turística de Lleida se concentra sobre todo en los Pirineos, pero la región de Ponent -que comprende las comarcas del Segrià, Noguera, Pla d'Urgell, Urgell, Segarra y Garrigues, además de las comarcas aragonesas de la Franja- tiene una gran riqueza patrimonial que muchas veces pasa desapercibida. Desde la Seu Vella, en la capital leridana, a las construcciones de piedra seca, los castillos de la Segarra y el Urgell y las pinturas del Cogul, pasando por el poblado ibérico de Arbeca.

En este último punto encontramos un conjunto arqueológico excepcional habitado inicialmente por la tribu de los ilergets.
Se encuentra situado en el extremo noroeste del término municipal, a cuatro kilómetros de Arbeca, y se trata de una antigua fortaleza construida en el siglo VIII a. C. en la que casi toda la superficie construida corresponde a un sistema defensivo formado por doce torres.

Además de visitarse, también ofrece un conjunto de experiencias como degustaciones de aceite de oliva arbequina, una de las variedades de aceituna más preciada del mundo.

El pasado modernista de Reus

Si Tarragona es la capital de la provincia, Reus es la capital del modernismo. El arquitecto Antoni Gaudí vivió en la capital del Baix Camp su niñez y juventud, aunque ningún edificio de la ciudad lleva su firma. Pero sólo hace falta pasear por el centro histórico para ver que es un estilo muy presente en la ciudad. Una muestra de ello es la casa Navàs, un edificio que se encuentra en la plaza del Ayuntamiento diseñado por Lluís Domènech i Montaner. Se puede visitar su interior.

Continuamos el recorrido por la calle Monterols, donde encontramos las casas Laguna y Carpa, ambos edificios diseñados por el arquitecto Pere Caselles i Tarrats.

En la arrabal de Santa Anna también hay varios edificios modernistas, como la casa Serra, de Joan Rubió, que destaca por su fachada principal, y la casa Marco, del hijo de Domènech i Montaner, el arquitecto Pere Domènech i Roura. En la arrabal de Martí Folguera encontramos la casa Munné, y en la arrabal de Sant Pere, están las casas Homdedéu y Anguera.

Acabamos la ruta en el Institut Pere Mata, que queda un poco alejado del centro, pero es uno de los grandes símbolos del modernismo en Reus. Por cierto, antes de irte de la ciudad, tienes que visitar el Centro Gaudí y hacer un vermut Miró en la plaza Mercadal.

De 'El Perfume' a 'Juego de Tronos': ruta cinematográfica por Girona

Catalunya ha sido escenario de películas y series en varias ocasiones, pero hay un territorio que destaca por encima de las demás: Girona. Tanto la capital como distintas poblaciones de la Costa Brava han acogido rodajes de producciones tan populares como Juego de Tronos, El Perfume, Soldados de Salamina o Tengo ganas de ti. Te proponemos realizar una ruta cinematográfica por Girona. Eso sí, lo acotamos a la capital gerundense, para que se pueda hacer en un día.

Empezamos por el casco antiguo, donde David Trueba utilizó localizaciones como el Bar Bistrot, el Bar Núria, el Pont de Pedra, la Llibreria 22 y la facultad de Letras del UdG para grabar Soldados de Salamina. Continuamos la ruta por la pujada de Sant Domènech y los Jardines de la Francesa, donde pasaron los protagonistas de la película El Perfume.

El Pont d'en Gómez, el Restaurante Dolce Vita de plaça Independència, el Cine Truffaut, Pontmajor, Can Gibert del Pla o la plaza de Emili Grahit también han sido el escenario de varias escenas de los filmes Tengo ganas de ti, de Fernando González, protagonizado por los actores Mario Casas, María Valverde y Clara Lago, y Murieron por encima de sus posibilidades, de Isaki Lacuesta.

No podemos olvidarnos del rodaje que ha situado Girona en el mundo: el de la serie de televisión Juego de Tronos, que convirtió la escalinata de la catedral y los entornos de la iglesia de Santa María en auténticos escenarios medievales.

Enoturismo en el entorno de Montserrat

El Priorat, el Maresme, el Penedès, el Alt y el Baix Camp... Todos estos lugares son muy conocidos por su tradición vinícola. Pero la Catalunya Central también se caracteriza por ser una de las zonas con más viñedos del país. De hecho, en 1995 se creó la Denominación de Origen Pla de Bages, que agrupa a doce bodegas de la comarca, que se encuentran principalmente en las poblaciones de Manresa, Artès, Sant Fruitós de Bages, Fonollosa, Salelles y Mayans.

Las propias bodegas ofrecen decenas de experiencias enoturísticas de todo tipo, como una ruta por las tinas de piedra seca que quedan en las montañas de Mura, Talamanca y el Pont de Vilomara y Rocafort, donde te enseñan los métodos de elaboración de vino que utilizaban en el siglo XVII, a maridajes y catas entre viñedos en el entorno de Montserrat.

Los pasajes más inéditos de Barcelona

Acabamos con una propuesta urbana en la capital catalana. A menudo, los edificios o puntos más emblemáticos de una ciudad enmascaran otros lugares que guardan un encanto especial. En el caso de Barcelona, los pasajes. Algunos de ellos te transportan a épocas pasadas o hacen que te olvides de que estás en una gran urbe. Es el caso del pasaje Premanyer, en la Eixample, diseñado por Jeroni Granell y construido en 1864, o el pasaje Mercader, en la esquina de Provença. Éstos son algunos de los más bonitos.