El lingüista estadounidense Noam Chomsky recibió este martes el alta del hospital privado Beneficiência Portuguesa, ubicado en São Paulo (Brasil) y continuará el tratamiento médico en su hogar, según ha informado el mismo centro.

El comunicado, firmado por el director ejecutivo del centro Renato Vieira, y el cardiólogo Marcelo Sampaio, tiene lugar después de los rumores sobre la supuesta muerte del intelectual. Las redes sociales se llenaron de mensajes que lamentaban su fallecimiento. Tras conocerse la verdad, figuras como Iñigo Errejón rectificaron y celebraron que Chomsky siga vivo.

El líder de Más País no es el único que se creyó los rumores. La oficina en São Paulo del Partido de los Tabajadores, la formación de Lula da Silva, expresó "gratitud" por el legado de Chomsky y su "compañerismo en la lucha". También Pablo Iglesias le deseó al intelectual que la tierra le fuese leve, antes de rectificar.

Noam Chomsky tiene 95 años y había ingresado en el hospital para tratar un accidente cerebrovascular masivo que sufrió el año pasado. El lingüista se recuperaba de las secuelas, como dificultades para hablar o mover el lado derecho del cuerpo. Así lo informó hace unos días el medio brasileño Folha de São Paulo.

Ese mismo diario indicó que la esposa de Chomsky, la brasileña Valeria Wasserman, tomó la decisión de trasladar al filósofo desde EEUU hasta esta ciudad en un avión ambulancia con el objetivo de cambiar el tratamiento y acelerar su recuperación.

El profesor emérito de la Universidad de Arizona es considerado el padre de la lingüística moderna y referente de la izquierda. Chomsky es autor de más de un centenar de obras sobre su ámbito de especialidad, sobre todo relacionados con la manipulación de la comunicación de masas. Además también ha escrito sobre cuestiones geopolíticas como el conflicto en Oriente Medio.