Colectivos sociales piden "el fin de la persecución a los manteros" tras la muerte de Mahmoud mientras escapaba de la Policía en Sevilla

La asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía ha exigido "el fin de las redadas y la persecución al colectivo de manteros y vendedores ambulantes" tras la muerte de Mahmoud Bakhum. El senegalés, de 43 años, falleció este domingo en Sevilla después de arrojarse al río Guadalquivir en el marco de un dispositivo policial contra la venta ambulante.

El colectivo ha lamentado en un comunicado que Mahmoud "murió, únicamente, por intentar ganarse la vida dignamente como vendedor ambulante" y ha exigido "una investigación independiente y el esclarecimiento de todas las circunstancias que rodean el dramático fallecimiento". El Sindicato de Manteros de Madrid también se ha pronunciado en los mismos términos. "Las leyes racistas nos mantienen en una situación de total desprotección y se ceban con nuestras vidas", denuncian en X, antes Twitter.

Pro Derechos Humanos de Andalucía, más allá de la responsabilidad penal que pudiera recaer sobre quienes participaron en la persecución, señala al alcalde de Sevilla, José Luis Sanz, como el "responsable político último de la muerte de Mahmoud". La comunidad senegalesa se ha manifestado este lunes en Sevilla y ha pedido esclarecer la muerte de su compañero, que no sabía nadar. La Policía Local ha detenido a uno de los manifestantes.

La asociación andaluza ha denunciado que la "criminalización institucional de la pobreza se está cobrando vidas humanas" y ha recordado que la primera medida que tomó el alcalde de Sevilla fue implementar un plan contra la venta ambulante, dirigido específicamente a los colectivos más vulnerables que, con esta práctica, "intentan sobrevivir ante la falta de oportunidades". 

Las personas migrantes son las que más frecuentemente se ven obligadas a recurrir a la venta ambulante ante la "imposibilidad de acceder a otros trabajos", como consecuencia de la aplicación de la Ley de Extranjería. "Los periódicos omiten que el mantero se vió obligado a lanzarse al Guadalquivir por una persecución policial. Como con Mame Mbaye, dirán que la Policía no lo mató. La Ley de Extranjería mata gente cada día", insisten desde la plataforma RegularizaciónYA. 

Pro Derechos Humanos de Andalucía recuerda también el caso de Mame Mbaye, que también se dedicaba a la venta ambulante. El joven murió en Madrid al sufrir un infarto cardíaco tras una larga persecución policial. "La muerte de Mahmoud Bakhum es un caso de racismo institucional y violencia policial", sentencian desde Adelante Andalucía, para luego exigir una "investigación inmediata" y "responsabilidades".