Equipos del Gobierno ya limpian pellets en Asturias mientras Galicia sigue sin pedir ayuda

Seis equipos de limpieza llegan este miércoles a las costas de Asturias para trabajar en la contención del desastre ambiental generado por los pellets de plástico que desde un mes perdió un carguero polaco en aguas portuguesas. Fueron al menos seis contenedores con millones de pellets los que cayeron al Atlántico desde el buque Toconao el pasado 8 de diciembre, unos hechos que ya han sido denunciados por la vía penal por grupos ecologistas gallegos mientras que a, nivel político, el vertido se ha convertido en una batalla entre la Xunta de Galicia (PP) y el Ejecutivo central.

El Principado y el Gobierno central han acordado la movilización de estos seis grupos que trabajarán juntos en la retirada de las bolas de plástico, después de que el Gobierno asturiano elevara a nivel dos la alerta y solicitara apoyo al Ejecutivo central apenas tres días después de que los primeros residuos empezaran a llegar a sus playas.

Galicia sigue sin pedir ayuda

No ocurre lo mismo en Galicia, principal región afectada por este vertido, que ha tardado varias semanas en activar el nivel dos de alerta, protocolo necesario para que el Gobierno central preste su apoyo. En una entrevista en Cadena SER, la conselleira de Medio Ambiente de la Xunta, Ángeles Vázquez, ha asegurado que  "es responsabilidad del Gobierno español frenar la marea en el mar" y que no tiene previsto solicitar apoyo concreto, pues "el Gobierno tiene que saber de primera mano qué medios necesitan".

El Gobierno gallego elevó el nivel de arte el pasado martes a mediodía, aunque aún no ha aclarado al Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico qué recursos necesita y dónde deben intervenir.

El despliegue en Asturias

El Principado de Asturias, donde gobierna el PSOE, elevó el martes su nivel de alerta en el Plan Territorial de Contingencia por Contaminación Marina Accidental. Este miércoles ya tiene disponibles varios equipos que trabajarán en los concejos de Castropol y Tapia de Casariego, en el extremo occidental de Asturias, y un segundo en Navia, también en el occidente, en los arenales de Frejulfe y Barayo, ha detallado la Delegación del Gobierno en Asturias.

Otro operativo se ubicará en el playón de Bayas, que ocupa terrenos de los concejos de Soto del Barco y de Castrillón, en la zona central, donde habrá un equipo más para la limpieza de las playas de Espartal, Salinas y San Juan.

Ambos gobiernos han acordado la movilización de un quinto equipo en las playas España y Rodiles, en Villaviciosa, y un sexto y último en Llanes, en el oriente, donde empezarán con la limpieza de Barro y Poo.

Los plásticos llegan a Francia

Los pellets, que han continuado extendiéndose por la costa gallega y también han llegado a playas de Cantabria e incluso a Francia, se extienden por todo el litoral asturiano en "menor o mayor medida", según apuntó este martes el consejero de Fomento, Cooperación Local y Prevención de Incendios, Alejandro Calvo.

Calvo precisó que, hasta el momento, "la afección es pequeña en cuanto a la parte visual", si bien advirtió de que existen "varias decenas de focos", lo que ha llevado al Ejecutivo asturiano a adoptar una atención "absolutamente exhaustiva".

Galicia mantiene su guerra al Gobierno

La conselleira de Medio Ambiente mantiene que  "son ellos [el Ministerio] los que tienen que habilitar el dispositivo" de apoyo y ha añadido que el presidente gallego, Alfonso Rueda, envió el martes una carta a la vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, en la que le pide "que ejerza las competencias que tenía que haber activado desde el minuto uno".

Además, en la misiva le urge que actúen dentro del mar, "que es donde debemos rescatar los sacos antes de que lleguen a tierra", porque, en su llegada a las costas, al ser de un material de "rafia", se rompen y es ahí cuando se esparcen por los arenales.

Por otro lado, la conselleira ha negado que en la Xunta hayan tardado demasiado tiempo en elevar el nivel de alerta y ha asegurado que se activó "desde el momento que se tiene conocimiento" del vertido.

Con todo, ha dicho, el dispositivo se inició en el nivel cero, "que es de carácter informativo". En el nivel uno, la Xunta se coordinó con los ayuntamientos y ya, de forma posterior, se ha activado el nivel dos porque fue una "exigencia" del Gobierno para que enviasen medios a Galicia.

A su juicio, "es increíble que no haya habido antes esa colaboración institucional" pese a que, ha dicho, es responsabilidad del Gobierno lo que sucede en el mar.

Teresa Ribera: "Falta una reacción rápida"

En un entrevista en RNE este miércoles, la ministra Ribera ha negado que haya faltado información sobre el vertido. "Afortunadamente hay todo un tracking, toda una trazabilidad de cómo se van produciendo las comunicaciones desde el mismo día 13 de diciembre en el que el 112, el servicio de la propia Xunta, se comunica con las autoridades de Capitanía Marítima, de Marina Mercante, diciendo que hay particulares que están avisando de la aparición de esos pellets en las playas de Porto do Son y de Ribeira", ha destacado.

"Lo que echamos en falta es una reacción rápida de limpieza o una petición de colaboración para esa limpieza", ha declarado la vicepresidenta, al tiempo que ha insistido: "Una vez que está en tierra, la reacción inmediata debe ser recogerlo, recopilarlo cuanto antes, con todas las garantías y siguiendo las recomendaciones de los expertos".

En este punto, Ribera ha afirmado: "¿La Xunta lo puede hacer por sí misma? Fenomenal. ¿La Xunta requiere ayuda? Encantados de dársela. Yo creo que esto es el momento en el que estamos, el momento en el que lo que procede es trabajar todos juntos, porque hubiera procedido desde hace tiempo, pero evidentemente estamos a la espera de ver cómo desde la coordinación de la propia Xunta se pueden poner a disposición los medios de la Dirección General de Costas para la limpieza del litoral".

Asimismo, Ribera espera que "a lo largo de esta mañana" la Consejería del Mar y la Consejería de Medio Ambiente "puedan especificar la manera" en la que el Gobierno pueda contribuir a solucionar la situación. "Estamos todos a su disposición", ha remachado.

Preguntada sobre si tiene determinado el Ministerio dónde podría actuar en el caso de que Galicia pida efectivos en tierra, ha aclarado que esto es algo que "tiene que determinar la propia Xunta", que le tiene que orientar sobre cuáles son no solamente los municipios o las playas, sino el tipo de ayuda que echa en falta y que considera más prioritario para poder activar. "Mientras tanto, nosotros lo que hemos ido haciendo es organizar nuestros propios equipos, ir recabando material", ha indicado.

En cuanto a si puede haber problemas para las personas por el consumo de alimentos procedentes del mar, la vicepresidenta ha lanzado el mensaje de que "el mar no puede ser un vertedero". "En principio, todas las alertas, todos los protocolos de seguridad alimentaria funcionan con normalidad y no se ha enviado ninguna señal de alerta específica por parte de las autoridades de la Xunta", ha concluido.