Este artículo se publicó hace 3 años.
Los vínculos de Dolores Delgado con los protagonistas del 'caso Villarejo' que pueden complicarle su mandato
La Fiscalía General del Estado atraviesa una grave crisis por el cuestionamiento en torno a su máxima autoridad. La fiscal general acumula polémicas por sus encuentros con Villarejo y la amistad de este con el exjuez Garzón, pareja de Delgado. Esas polémicas cobran trascendencia tras la denuncia del fiscal Stampa por su salida del 'caso Villarejo'.
Madrid--Actualizado a
En el ecuador de su mandato al frente de la Fiscalía General del Estado (FGE) y con el reciente aval del Tribunal Supremo a su nombramiento en febrero de 2020, al desestimar los recursos de Vox y PP que consideraban que haber ocupado previamente la cartera de Justicia la deslegitimaba para el cargo de fiscal general, Dolores Delgado atraviesa en estos momentos una de las mayores crisis de su ajetreado mandato.
El motivo es su presunta conexión con algunos de los protagonistas de uno de los mayores casos de corrupción en España de los últimos años: el 'caso Villarejo' o macrocausa 'Tándem', con decenas de ramificaciones y en el que el comisario jubilado José Manuel Villarejo es una pieza más en una red corrupta de empresarios, policías, jueces, abogados y periodistas para enriquecerse.
En primer lugar, la relación de pareja con el exjuez Baltasar Garzón pone a Delgado contra las cuerdas por el 'caso Villarejo' porque el bufete que gestiona, ILOCAD Baltasar Garzón Abogados, se ocupa de la defensa de varios imputados en la causa, entre ellos el comisario Enrique García Castaño y el ex Director Adjunto Operativo (DAO) de la Policía Eugenio Pino. Es decir, existe un interés directo de la pareja oficial de la fiscal general en la causa 'Tándem', por mucho que se trate de disimular afirmando que Garzón no es el abogado personal de esos imputados, sino que lo son los letrados del bufete.
Así lo cree el fiscal Ignacio Stampa, que ha presentado una reclamación patrimonial ante el Ministerio de Justicia por valor de 245.203 euros por "irregularidades" en el proceso selectivo para ocupar una plaza fija en la Fiscalía Anticorrupción en octubre de 2020. Stampa se quedó fuera y fue apartado del 'caso Villarejo'. Cree que Delgado debió abstenerse de la deliberación sobre las plazas de Anticorrupción debido a que tiene "interés" en el caso, al ser su pareja dueño del bufete que defiende a varios ex altos mandos policiales imputados en la causa. Este miércoles, está previsto que la fiscal general dé cuenta sobre el 'caso Stampa' en la reunión del Consejo Fiscal.
Por otro lado, la propia relación de Dolores Delgado con Villarejo siembra dudas en relación a la actuación de la Fiscalía en el caso, ya que, por ejemplo, no acusa de blanqueo de capitales y organización criminal salvo en la pieza principal y no en el resto de la treintena de piezas en las que se divide la macrocausa. Esos dos son los delitos más graves y los que más penas acarrean y de cuya investigación se podrían extraer importantes evidencias. En estos días se juzga a Villarejo y a otra veintena de personas por tres piezas acumuladas, 'Iron', 'Land' y 'Pintor'. El próximo viernes el tribunal podría pronunciarse sobre la nulidad de las grabaciones incautadas al comisario, como piden las acusaciones. Esas grabaciones constituyen una de las pruebas más importantes de la causa.
Encuentros con Villarejo
A raíz de la difusión en septiembre de 2018 de la grabación efectuada por Villarejo durante una comida con Dolores Delgado y Baltasar Garzón, entre otros comensales, la entonces ministra de Justicia envió un comunicado afirmando que según recordaba había coincidido en tres encuentros con Villarejo. El primero, al que no puso fecha, se habría producido durante unas jornadas jurídicas, que no identificó, durante las cuales Garzón le habría presentado al comisario.
El segundo encuentro fue una comida en el restaurante madrileño Rainxo, en octubre de 2009, donde Dolores Delgado, entonces fiscal de la Audiencia Nacional, hizo comentarios homófobos sobre el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska. También explicó la fiscal Delgado cómo vio a jueces y fiscales españoles en compañía de chicas menores de edad en Cartagena de Indias (Colombia) durante un viaje oficial al país sudamericano. Además, Delgado se refirió con la frase "éxito garantizado" a los planes que Villarejo desveló en el almuerzo respecto a abrir una agencia de modelos, en referencia a un prostíbulo. La filtración de este audio, probablemente por la órbita de Villarejo, bien podría tratarse de una advertencia a Dolores Delgado.
El tercer encuentro reconocido por la actual fiscal general del Estado con el comisario Villarejo se produjo el 4 de julio de 2017, cuatro meses antes de que el policía fuera detenido. Fue durante otra comida en la que también estuvieron presentes el comisario Carlos Salamanca, exaltocargo de la Comisaría General de Extranjería, detenido el mismo día que Villarejo, el 3 de noviembre de 2017. También acudió el comisario José Luis Olivera, entonces jefe del Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado (Citco).
Precisamente Dolores Delgado justificó su presencia en dicha comida aduciendo, cuando años después se conocieron sus encuentros con Villarejo, que tuvo una cita con Olivera para tratar temas sobre terrorismo yihadista. Pero la coincidencia en el tiempo con un asunto que interesaba a Villarejo por tratarse de un encargo que le habían hecho unos clientes ponía en serios apuros a la actual fiscal general.
Aquel tercer encuentro se produjo en pleno proceso de extradición del naviero español Ángel Pérez Maura, reclamado por Guatemala por presunto delito de soborno para hacerse con la construcción de la terminal de Puerto Quetzal. Los hermanos Pérez Maura contrataron presuntamente a Villarejo para frenar la entrega al país centroamericano. De esta investigación se ocupa la pieza 'PIT' de 'Tándem'. En mayo de 2018 la Audiencia Nacional rechazó finalmente la extradición.
La conversación grabada por Villarejo el 17 de julio de 2017 da cuenta de ese encargo recibido por los Pérez Maura y de cómo el comisario utilizaba la amistad con Garzón y Dolores Delgado para tejer una red de influencia en la Audiencia Nacional de cara a sus clientes. En aquella reunión acompañó a Villarejo su amigo el empresario Adrián de la Joya.
–Álvaro Perez Maura [hermano de Ángel]: En Colombia y entonces en las reuniones de aquí, el "Mago" le ve [aquí se refiere a Baltasar Garzón], está con él [se refiere a Iván Velasquez, director de la CICIG], le acompaña a la Audiencia...
–Villarejo: Sí, le acom..., le ayuda, le AYUDA a las relaciones, lo que él quería, él quería tener una reunión en vez de a puerta fría, una reunión más razonable con lo que es la Fiscalía de la Audiencia...
–Adrián de la Joya: Bueno, no es solamente eso, es que la Lola es la que se mete en la reunión, la Lola es la novia del Balta.
–Villarejo: Bueno, es una amiga joder, no entres en...
–Álvaro Pérez Maura: La Lola es la que está en...
–De la Joya: En la Audiencia Nacional, es la fiscal jefe de extradiciones y yihadismo, que comimos con ella el...
–Villarejo: Lola DELGADO, María Dolores DELGADO, que es la responsable.
Tan explícito fue Villarejo en sus conversaciones con los hermanos Pérez Maura que la Fiscalía General del Estado se vio obligada a emitir un comunicado en el que afirmaba que Delgado no participó en la tramitación de la solicitud de extradición contra Ángel Pérez Maura.
Un cuarto encuentro
Pero no fueron tres, sino cuatro los encuentros entre Delgado y Villarejo, según pudo averiguar Público a través del estudio del sumario de la causa 'Tándem'. El 24 de mayo de 2017 consta en las agendas del policía una cita con Garzón y la fiscal Delgado, el comisario Carlos Salamanca y "Andreu", en posible referencia al juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu, citado más de una vez en las agendas de Villarejo.
La relación entre Villarejo y Garzón viene de lejos y está acreditada. La unidad de Asuntos Internos de la Policía descartó transacciones económicas entre ellos y el exjuez ha negado siempre haber hecho negocios con el policía. Pero las conversaciones grabadas por Villarejo ponen de manifiesto que cierta preocupación invadía a Garzón según avanzaba el año 2017 y el cerco al comisario y a sus colaboradores iba estrechándose. El mismo día que Público desveló parte del ingente patrimonio del comisario Villarejo, Garzón hizo una llamada a su amigo. Fue el 6 de febrero de 2017.
Se acababa de conocer que un amigo de ambos, el comisario Enrique García Castaño, había sido destituido al frente de la Unidad Central de Apoyo Operativo (UCAO) de la Comisaría General de Información, por una grabación difundida por este medio, en la García Castaño explicaba que el ex director adjunto operativo (DAO) de la Policía Nacional, Eugenio Pino, se había reunido con un mando del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) para advertirle de que si era imputado en la causa del pequeño Nicolás harían pública la información que Villarejo le había sacado a Corinna y que pondrían al descubierto el dinero que el rey emérito tenía fuera de España y los negocios que habían hecho juntos.
En la conversación entre Garzón y Villarejo el 6 de febrero de 2017, grabada por el comisario e incorporada a la pieza 'PIT' que se instruye en la Audiencia Nacional, Garzón informaba a Villarejo de que se había puesto en contacto con su abogado de cabecera, Ernesto Díaz Bastién, para informarse "objetivamente" sobre sus temas. Garzón le reprocha a Villarejo con cierta sorna que siempre diga que todo le va bien. Esa misma tarde se verían en el despacho del exjuez, según la conversación.
Pillada con Eduardo Inda
En ese contexto de afinidad entre su pareja, Baltasar Garzón, y el comisario Villarejo se puede explicar otro polémico encuentro de la fiscal general: el que tuvo lugar el 3 de marzo de 2021 con Eduardo Inda y Manuel Cerdán, periodistas cercanos a Villarejo y director y adjunto a la dirección respectivamente del digital OKdiario. La reunión se organizó en un piso ubicado en el centro de Madrid horas después de que se conociera la puesta en libertad de Villarejo por parte del juez Manuel García-Castellón y duró cerca de una hora, según la exclusiva de CTXT.
Dolores Delgado no pudo explicar por qué se reunió con ambos periodistas en un piso de Madrid, al parecer, propiedad de Baltasar Garzón; simplemente afirmó que se ha reunido con "muchísimos medios de comunicación en los espacios más variopintos y en función de las circunstancias", dijo la fiscal general en una entrevista en la Cadena Ser, en la que justificó la reunión en su deseo de "retomar" su agenda con los medios de comunicación y en el orden que la había dejado por la pandemia y que se entrevistó con OKdiario "porque forma parte de los medios de comunicación". "La entrevista con OKDiario viene desde septiembre. He tenido que ir posponiendo muchas entrevistas".
Comentarios de nuestros suscriptores/as
¿Quieres comentar?Para ver los comentarios de nuestros suscriptores y suscriptoras, primero tienes que iniciar sesión o registrarte.