La televisión pública italiana RAI abrió este lunes un expediente disciplinario a dos comentaristas deportivos que hicieron referencias sobre el peso de las deportistas y profirieron burlas racistas durante la retransmisión en directo de las pruebas de trampolín de los campeonatos mundiales de natación.

Entre los comentarios denunciados por los espectadores figuran uno dirigido a las participantes de Países Bajos ("las holandesas son grandes"), a quienes compararon con la representante italiana Giulia Vittorioso ("es grande, eh") para finalmente concluir entre risas que "en la cama son todas iguales".

Asimismo, los dos comentaristas dijeron en plena retransmisión en directo comentarios racistas como "fuma bien, fuma sano, fuma pakistaní" ("fuma bene, fuma sano, fuma pakistano") y llamaron a un nadador italiano "Liccaldo" en lugar de Riccardo porque "los chinos lo dirían así".

Se trata de una nueva polémica para uno de los comentaristas expedientados, Lorenzo Leonarduzzi, quien ya fue suspendido en 2020 por insinuar que el segundo clasificado de un rally era en verdad una mujer; dos años antes ocupó titulares por escribir en su perfil de Facebook "feliz cumpleaños" en alemán el 129 aniversario del nacimiento de Adolf Hitler.

En la picota

La RAI, un ente histórico del panorama audiovisual europeo, se encuentra en la picota desde hace varios meses por la renovación de cargos propiciada por el gobierno de la ultraderechista Giorgia Meloni, y que ha supuesto la salida de varios periodistas históricos de la cadena entre acusaciones de manipulación.

Precisamente este mismo lunes, la RAI canceló un programa presentado por el periodista Filippo Facci después de que cuestionara en una columna de opinión la investigación judicial abierta a uno de los hijos del presidente del Senado italiano, Ignazio La Russa, que ha sido denunciado por agresión sexual por una joven de 22 años.

Asimismo, uno de los periodistas históricos del ente público, Fabio Fazio, anunció que abandonaba la cadena tras cuatro decenios, salida que supuso el fin del espacio Che tempo che fa, una exitosa fórmula que combinaba entrevistas con personajes de fama internacional con reportajes y debates.

"Toda la política se siente legitimada tras el resultado electoral a comportarse como propietaria de lo público con poca consideración por el bien común y con una desbordante codicia", dijo el periodista al explicar las razones de su marcha.

La Federación Nacional de Prensa Italiana (FNSI), el sindicato unitario de los periodistas italianos, cuestionó la salida de Fazio de la RAI y su secretario general, Giuseppe Giulietti, advirtió de que "las dimisiones obligadas de otros periodistas son sólo el primer acto de la nueva narrativa de la derecha en el Gobierno".