Más del 41% de la población catalana cree que tras las próximas elecciones del    21-D se volverá a la legalidad autonómica, aunque solo la mitad de lo que creen esto les gustaría, ya que la respuesta mayoritaria en relación con la preferencia de los votantes es la apertura de un proceso de negociación entre la Generalitar y el Gobierno central con un 36,2%. 

Estos son los resultados del sondeo realizado por la consultoría GAD3 para La Vanguardia, en el que se refleja una diferencia entre cómo la sociedad cree que acabará el proceso soberanista tras la aplicación del artículo 155 y de cómo le gustaría que acabara. 

Los resultados reflejan que sólo un 15% cree que el proceso acabará con la independencia de Catalunya, aunque el 28,7% lo desee, mientras que el 21% cree que acabará con un proceso de negociación llegando a ser un 36,2% los que desearían que el proceso acabara así, como opción mayoritaria en cuestión de preferencias. Sólo un 8,7% cree que acabará con la suspensión de la autonomía por un período indeterminado, siendo un 4% quienes lo desearían. 

En lo que sí coincide la mayoría de votantes es en la percepción de que el proceso soberanista ha afectado a la convivencia en Catalunya, votando un 68% afirmativamente sobre este cuestión. 

Igualmente, un 58,3% cree que Catalunya ha salido perdiendo tras los cinco años de proceso soberanitas, mientras que casi un 27% considera que existen beneficios durante esa etapa. Cifras similares de encuentran en la cuestión sobre la imagen exterior de Catalunya, ya que un 55% cree que esta imagen ha empeorado mientras que un 31% considera que ha mejorado. 

En esta consulta, también se conoce los sentimientos de los votantes respecto a su nacionalidad, entre los que un 42,6% de los consultados se consideran tanto catalanes como españoles, mientras que un 21% se siente más catalán que español.