La dirección de Cs critica a los excargos que se han fugado al PP "al ver que no tenían futuro en su carrera política"

Para la dirección de Ciudadanos no merece la pena hablar de la numerosa lista de cargos que han marchado del partido naranja para integrarse en el PP. A juicio del  vicesecretario general de Cs, Daniel Pérez, se trata de "redencillas" y "cuestiones internas" que "no conducen a ningún sitio" y tampoco preocupan a la ciudadanía. Sus palabras se producen después de que la pasada semana el Ejecutivo de Isabel Díaz Ayuso fichara a dos exaltos cargos del partido, Toni Cantó y Patricia Reyes.

Pérez ha señalado que esas personas han demostrado que estaban en Cs para ver "qué podían rascar". Entre esos nombres también figura el exsecretario de organización de Cs, Fran Hervías, al que desde la dirección de Cs le atribuyen la operación para frustrar la moción de censura en la región de Murcia contra el PP y la aceleración de la descomposición del partido en diversos territorios.

Para el secretario de comunicación cuando esos cargos "han visto que no tenían futuro en su 'carrera política' han decidido dar un volantazo y atender a cantos de sirena que pretenden llevarles por otros derroteros. Ellos verán, son mayorcitos", ha zanjado en rueda de prensa desde la sede de la formación.

Pérez también ha hecho hincapié en que en Cs están "más pendientes de los que se quedan y de los que tienen que venir" y que a él personalmente le "preocupan más" los concejales de su formación que trabajan sin cobrar y están expuestos a presiones en sus territorios. En ese sentido, también ha quitado importancia a las informaciones que sitúan a, Albert Rivera, como el "asesor de cabecera" del líder del PP, Pablo Casado.

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"No será este portavoz ni por supuesto Ciudadanos quien cuestione esa capacidad de Albert Rivera de hacer lo que estime oportuno, lo que apetezca y, en uso de su libertad, lo que estime en cada momento", ha valorado, después de remarcar que el expresidente de los 'naranjas' anunció su dimisión y retirada de la política en noviembre de 2019 tras la debacle del partido en las generales.