La invasión rusa a Ucrania llega a su día 57. El ejército ucraniano continúa resistiendo a las tropas de Vladímir Putin, que durante esta última semana han reforzado sus despliegues para aumentar la presión tanto en el este como en el oeste del país. 

Rusia ha agrupado militares, especialmente, en la región del Donbás para ocupar la zona en la que se encuentran las autoproclamdas repúblicas de Donetsk y Lugansk. También ha redoblado los ataques en la portuaria ciudad de Mariúpol, donde soldados y civiles ucranianos aguantan en la acería de azovstal. 

El objetivo de los militares rusos es establecer un vínculo terrestre para conectar la parte occidental de Rusia con la península de Crimea. Mientras, en otras zonas del país, como en la ciudad de Leópolis, se han reportado ataques y más muertes de civiles.

Conocer el número de víctimas en medio de una guerra es una tarea compleja. Los Estados implicados en el conflicto pueden desplegar altas dosis de propaganda a la hora de ofrecer este tipo de datos. Prueba de ello es el contradictorio número de soldados muertos que detallan Kiev por un lado y Moscú por otro. El primer país asegura que la cifra de militares rusos fallecidos se sitúa en 20.800, mientras que el número de efectivos propios es de 1.300. Rusia informa que, de sus soldados, han perecido 1.350 y que ha abatido a unos 14.000 militares ucranianos. 

2.224 civiles muertos y 2.891 heridos

No obstante, la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH) sí que ha podido verificar las cifras relativas al número de personas fallecidas. El último informe publicado de este organismo indica que han muerto 2.224 civiles y han resultado heridos 2.891 desde que comenzó el conflicto el 24 de febrero.

De los fallecidos, 631 son hombres; 383 mujeres, 61 niños y 42 niñas. Hay 70 niños y 1.037 adultos de los que se desconoce su sexo aún. El informe recoge que muchas de estas bajas se han producido en las regiones de Donetsk y Luhansk, sobre todo en las zonas controladas por el gobierno de Ucrania (746 muertos y 1.078 heridos).

Los sitios en manos de los prorrusos han reportado menos daños (79 muertos y 325 heridos). La ONU señala que estos decesos se ha producido por el empleo de armas explosivas, como bombardeos de artillería pesada. También destaca el uso de sistemas de lanzamiento de cohetes múltiples y ataques aéreos con misiles.