El resultado de los enfrentamientos de ayer en Londres entre la Policía y los manifestantes anticapitalistas acabó de manera dramática. Pese a que los partes de la Policía ayer indicaban la detención de 23 personas, la mayoría de ellas por llevar uniformes policiales, la realidad ha terminado siendo otra: una persona muerta y 86 detenidos.

La muerte de un hombre, sin duda, es la nota más negativa a la cumbre. Las marchas comenzaron de forma pacífica hasta que la Policía decidió bloquear a la marcha contra la cumbre del G-20 delante de la sede del banco de Inglaterra en Bank, para que no se unieran con la manifestación contra la guerra que tenía lugar en Bishop's Gate. Después de cerca de tres horas cercados, el ambiente empezó a calentarse entre los manifestantes, que terminaron por asaltar el Royal Bank of Scotland.

Durante dicho bloqueo un hombre perdió la vida según informó esta mañana Scotland Yard. En un comunicado, la agencia británica explicó que los agentes encontraron el cuerpo del fallecido tendido en el suelo tras ser alertados por un ciudadano. Según la BBC, el hombre de unos treinta años y que aún no ha sido identificado, pudo haber muerto por causas naturales.

El cuerpo policial señaló que había intentado infructuosamente reanimar al hombre, que fue trasladado en ambulancia a un hospital, donde se certificó su defunción.

El Servicio de Ambulancias explicó, por su parte, que a las 18.24 GMT había recibido una llamada telefónica de un ciudadano que informaba de que un hombre se había caído y estaba inconsciente, aunque aún respiraba, a las puertas del Banco de Inglaterra. Sin embargo, otra llamada cinco minutos más tarde comunicaba que la víctima había dejado de respirar.

La policía también comunicó la detención de 86 personas en las últimas 36 horas.

Según Skynews, el domicilio del ex director del RBS fue asaltada por la noche. Dicho banco se ha convertido en uno de los símbolos más llamativos de la crisis en Reino Unido. El Gobierno tuvo que asumir prácticamente el90% de las acciones debido a la mala gestión económica de la dirección.

El ya ex director de la entidad, Sir FredGoodwin, cobrarfá una pensión vitalicia de 700.000 libras al año pese a todo.