Este artículo se publicó hace 4 años.
"El rey es como el aloe vera. Cuanto más se le investiga, más propiedades tiene"
Redactor de Tremending.
-Actualizado a
Vamos a contar una historia: érase que se era un rey que obnubiló a una nación entera con su campechanía.
Pertenecía a un antiguo linaje de emprendedores a los que, al parecer, los españoles tomaron cariño.
Juan Carlos I salió de la nada pero, con mucho esfuerzo y dedicación, logró llegar a ser hijo de un Borbón y que así un dictador lo nombrara su sucesor.
Después, los españoles le votaron. O como dijo Suárez: "Yo metí la palabra rey en la Constitución y así dije que había sido sometido a referéndum ya".
Durante años los grandes medios de este país trataron a ese rey entre algodones.
Lo de ver en los tribunales a raperos y a viñetistas que se metieron con miembros de la Casa Real tampoco ayudaba mucho, la verdad...
Para ver algo crítico en un medio de los grandes había que acudir a la prensa extranjera.
Lo cierto es que todo el país le agradecía a Juan Carlos haber salvado la democracia.
Eso y otros logros del monarca, claro.
Un buen día abdicó en su hijo, Felipe VI para modernizar la institución. Ya entonces se intuía el camino que llevaba esto.
Pero en los últimos tiempos saltó todo por los aires...
Salieron informaciones sobre el escándalo de Corinna, su supuesta amante, y los 65 millones de euros que le habría 'regalado', según ella misma.
Los detalles de sus tejemanejes económicos comenzaron a ser publicados. Primero lo de las supuestas comisiones del AVE a la Meca. Felipe VI tuvo que renunciar a la herencia.
Acorralado por los escándalos, el emérito tuvo que huir de España.
Otra vez un rey, al exilio...
Una decisión que sin duda habrá afectado también a la reina Sofía...
Dicen que lo hizo para intentar preservar la institución de la monarquía.
No es el primero de su familia que tiene que tomar una decisión similar...
Y ahora, los que no eran monarquicos sino juancarlistas, son felipistas.
Ahora cada poco nos enteramos de una nueva investigación.
Además también se está escrutando si él y familiares como la reina Sofía usaron tarjetas opacas.
Según se ha publicado, hay sospechas incluso sobre una yegua de Victoria Federica, la nieta.
Cada día conocemos nuevos detalles o fotos más bochornosas.
De confirmarse las sospechas, habría que preguntarse qué le llevó a ese comportamiento.
Todo esto ha chocado con una Constitución que blinda al rey por las bravas: declarándolo inviolable. Será muy difícil que se le juzgue por ello.
Deja, eso sí, una herencia envenenada para su hijo.
Qué lejano se ve ahora todo aquello del caso Nóos e Iñaki Urdangarin, ¿eh?
Estas revelaciones hacen, como mínimo, reflexionar sobre el mito de la Transición ejemplar.
Y veremos si no hace tambalearse la continuidad de la monarquía en España. Todo puede pasar.
Aunque la derecha y el PSOE no parecen estar muy por la labor de abrir ese melón.
Desde luego si uno se fija, no se puede decir que no se veía venir...