La primera exhumación de un supuesto bebé robado dictada por un juez en España ha sido interrumpida debido a la lentitud de los trabajos, y será reanudada en las próximas horas en el cementerio de Alicante, sin que se descarte que continúe en los próximos días.
Según ha explicado el fiscal de Menores de la provincia de Alicante, Carlos Ferreirós, la caja donde debería estar el bebé nacido hace 31 años de Laura Perales aún no ha sido encontrada, puesto que se trata de una tarea que precisa 'tiempo y espacio'.
Las tareas conllevan una gran dificultad debido al gran número de restos existentes en la fosa común donde se opera y en la zona colindante, por lo que avanzan 'muy despacio' intentando que ninguna posible prueba resulte dañada.
'Es posible que la exhumación se alargue durante días, depende de lo que vayamos encontrando y de las observaciones del arqueólogo. Se está haciendo todo como una intervención quirúrgica, paso a paso y muy detalladamente', ha explicado el fiscal.
En el caso de que la caja que se busca no contuviera restos, se podría deber a que 'no había nada en su interior', aunque también podría ocurrir que éstos hubieran sido desplazados por movimientos de tierra, ha añadido. Si la comisión judicial encuentra restos del cuerpo, se hará una extracción de ADN y se citará a la perjudicada y a uno de sus hijos para completar la prueba.
La víctima de este supuesto caso de bebés robados, Laura Perales, ha mostrado su apoyo a los operarios municipales y ha señalado que 'cuanto más despacio -trabajen- mejor, lo están haciendo muy bien'. 'Estoy deseando ya que termine, de verdad, para bien o para mal, ha sido una mañana de espera muy dura', ha dicho.
Además, se ha mostrado segura de que la caja 'estar, está', aunque las excavaciones aún no han llegado al punto donde supuestamente se encuentra el obituario de madera.
La excavación se ha desarrollado entre las 10.40 y las 14.40 horas en la fila doce de la fosa común número 10 en presencia de la titular del juzgado de instrucción número 4 de Alicante, Cristina Ferrández, del fiscal Ferreirós, un arqueólogo, un forense y el presidente de la ANADIR, Antonio Barroso, entre otros.
El bebé de Laura Perales nació el 20 de noviembre de 1980 en el Hospital General de Alicante, aunque a los dos días se comunicó a la madre que había fallecido súbitamente por un fallo respiratorio, lo cual no coincide con los papeles médicos recibidos.
Se trata de la segunda exhumación realizada en la provincia de Alicante, tras la acometida a escasos metros de la de hoy el pasado 31 de enero para tratar de hallar a la melliza de María José Picó.
Respecto de este caso, el fiscal de Menores ha ratificado que los resultados de esta primera exhumación aún no se conocen debido a la acumulación de casos, pero ha manifestado que tratará de urgir al instituto forense para que las pruebas se practiquen con mayor celeridad.
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