El presunto etarra Arturo Cubillas se presentó ayer por sorpresa ante la Fiscalía General de la República en Caracas. 'No tengo nada que temer -afirmó-, han sido múltiples las notas de prensa en las que se me pretende atribuir que he participado en la comisión de hechos punibles, lo cual ha generado un desprestigio continuo hacia mi persona y mi familia afectando de manera considerable mi dignidad y mi reputación'.

Según declararon los dos presuntos miembros del comando Imanol de ETA, detenidos el 29 de septiembre, Cubillas fue la persona que les facilitó la infraestructura durante sus entrenamientos en Venezuela en el verano de 2008. El mismo presunto etarra ya había sido señalado por ex guerrilleros de las FARC como el enlace entre el grupo colombiano y ETA en territorio venezolano.

El Gobierno español ha pedido al de Hugo Chávez que abra una investigación para determinar la responsabilidad de Cubillas, funcionario de seguridad del Ministerio de Agricultura que ha participado en varias expropiaciones de tierras. Caracas trasladó el pasado miércoles al Gobierno español que Cubillas sería investigado.

En un comunicado hecho público tras comparecer ante el fiscal, Cubillas se quejó de la 'indefensión' sufrida durante estas semanas: 'No he podido refutar lo dicho en los artículos y estimo que el órgano más idóneo, objetivo y transparente es el Ministerio Público como director de la acción penal'. Cubillas está casado con una estrecha colaboradora del vicepresidente Elías Jaua y está considerado por las Fuerzas de Seguridad españolas jefe de la colonia etarra en Venezuela.