Los secretarios generales de UGT y CCOO, Cándido Méndez e Ignacio Fernández Toxo, escenificaron la presentación oficial de sus propuestas de cara al 20-N, aunadas en el documento Pacto por el empleo y la cohesión social, para ofrecer alternativas a las políticas de austeridad y recortes. El documento, que enviaron hoy a la patronal y a los partidos políticos, pretende influir en el debate preelectoral, pero, sobre todo, en lo que suceda a partir del 21 de noviembre, una vez que se conozca el ganador de las elecciones.

Tanto Méndez como Toxo se mostraron cautos a la hora de valorar cómo discurrirá una probable legislatura con el PP en el Gobierno e insistieron en su disposición al diálogo, sea cual sea el resultado electoral. Para el secretario general de UGT, una actitud abierta y sin prejuicios no es incompatible 'con la defensa firme de los derechos de los trabajadores'.

'Si gobierna el PP podemos encontrarnos con medidas que nos gustarán y otras que no. Espero que el Gobierno que salga del 20-N apueste tan decididamente como los sindicatos por el diálogo social', afirmó por su parte el líder de Comisiones.

Y es que una de las grandes apuestas de las centrales mayoritarias es precisamente la firma de un gran pacto que incluya al Gobierno, los sindicatos y la patronal, pero también a las administraciones autonómicas y locales. Un pacto con varias piezas inseparables: moderación salarial, control de precios, especialmente de aquellos con gran impacto en los bolsillos de la ciudadanía (energía, alimentos o transporte), reforma fiscal y reinversión de beneficios empresariales para generar empleo. 'O todas esas piezas funcionan al unísono o el pacto de salarios no tendría ninguna incidencia práctica en la solución de los problemas', señaló Méndez.

Toxo: 'Si gobierna el PP podemos encontrarnos con medidas que nos gustarán y otras que no' En cualquier caso y en clara referencia al fantasma de los recortes que planea sobre el PP, Méndez pidió a todos los partidos 'un esfuerzo para hablar con claridad y concreción' sobre sus propuestas electorales. 'El país necesita lealtad política', dijo. Aunque prefirió no hacer futuribles, el líder de UGT negó que la celebración de elecciones vaya a solucionar los problemas a los que se enfrenta España, una apreciación a la que se sumó Toxo. 'Por sistema, no van a resolver los problemas, como no lo hicieron en Portugal', precisó el secretario general de CCOO.

Fueron más contundentes ante la posibilidad de que los recortes que se están produciendo en algunas comunidades autónomas se extiendan tras el 20-N. 'Si se generalizan las políticas de ajuste sería una catástrofe social que pondría en tela de juicio, no sólo nuestro Estado del bienestar sino las posibilidades reales de recuperación', avisó Méndez.

Los dos secretarios generales subrayaron que el empleo debe ser la prioridad del próximo Gobierno. Entre sus propuestas figuran la mejora de la cualificación profesional para adaptarla a un nuevo modelo productivo y el fortalecimiento de los servicios públicos de empleo y de las políticas activas 'para ampliar y mejorar las capacidades y cualificaciones de las personas demandantes de empleo'. Con otras medidas colaterales, como la apuesta por la rehabilitación de viviendas, también ven posible una reactivación del empleo. Apuestan también por reforzar las prestaciones por paro para aliviar el aumento de personas sin prestaciones.

Otra de sus máximas es actuar sobre los ingresos y no sólo sobre los gastos, por eso proponen una reforma de la política fiscal que incluya una tipo de gravamen especial del 51% para las rentas más elevadas y una escala progresiva para los rendimientos del ahorro desde el 15% al 25%. También plantean incluir las participaciones de las sicav en el Impuesto sobre el Patrimonio y explorar algunas posibilidades dentro de la fiscalidad ambiental.