La Real mira hacia arriba

Empatados a puntos en la zona media de la tabla, ambos mirando hacia abajo mientras como quien no quiere la cosa se acercaban a las puertas de Europa, Real y Mallorca calibraban en Anoeta sus posibilidades para fugarse definitivamente del pelotón de los torpes y aspirar a empresas mayores. Fueron mejores los locales, sobre todo en la segunda parte, de ahí su triunfo con el sexto gol de Tamudo.

A la nula intencionalidad de unos y otros por intentar combinar, se unieron las inclemencias meteorológicas. La lluvia y sobre todo el viento racheado complicaron aún más el juego. Con Xabi Prieto de vuelta al equipo, hasta que el balón no fue a parar a sus pies, la Real no empezó a inquietar a Aouate. De hecho, las escasas ocasiones que tuvieron los locales en la primera mitad nacieron en las botas del 10 donostiarra.

A vuelta de publicidad, que se dice en televisión, la Real se adueñó del balón y Tamudo se encargó de rentabilizar el dominio con un gol marca de la casa. Pudo repetir el catalán a los pocos minutos, pero pecó de egoísmo. Xabi Prieto estrelló el balón en la escuadra con un lanzamiento imposible y Aranburu perdonó el 2-0.

Laudrup movió banquillo. Entraron en escena el Chori Castro y Aki. Fue el japonés quien obligó a Bravo a estrenarse. El Mallorca se estiró, pero no encontró portería, algo que esta temporada en Anoeta es sinónimo de victoria local. Un triunfo que encarama a la Real a la octava posición y con Europa mucho más cerca que el descenso.