Ronaldo Luiz Nazario de Lima ha vuelto a sentirse futbolista. Jugó 27 minutos en su debut con el Corinthians brasileño, un año y veinte días después de la grave lesión que hizo temer su retirada definitiva del fútbol.

El ex jugador del Real Madrid y del Barcelona entró en el minuto 67, en el partido que enfrentaba a su equipo contra el Itumbiara, correspondiente a la primera ronda de la Copa de Brasil.

Ronaldo pudo tocar varias veces el balón y volvió a mostrar que sus pies, a los 32 años, todavía atesoran la calidad que le convirtió en el mejor del mundo en tres ocasiones, según la FIFA.

El público de Itumbiara, que le ovacionó antes de que entrara en la cancha, aplaudió sus arrancadas, sus controles y sus regates. A punto estuvo de escaparse entre dos defensas en una ocasión, pero fue derribado y volvió a besar el césped.

Sin embargo, no consiguió rematar a puerta, en parte porque era el más vigilado, y también porque la tensión del partido ya estaba decayendo, puesto que el Corinthians tenía garantizada la clasificación a la segunda fase de la Copa con el 0-2 en el marcador.

En el equipo rival, que juega en la categoría regional del estado de Goiás (centro de Brasil), el ex mundialista se encontró con dos ex compañeros de la selección, Denilson y Tulio Maravilla.

Al salir del campo, una nube de periodistas rodeó al astro y uno de ellos le propinó un golpe con un micrófono en el ojo. Ronaldo se retiró a los vestuarios frotándose el párpado y sin ofrecer comentarios.

El máximo artillero de la historia de los mundiales no jugaba desde el 13 de febrero de 2008, fecha en la que se lesionó su rodilla izquierda, en un partido de la liga italiana entre su equipo, el Milán, y el Livorno.

Fichó por el Corinthians en diciembre y hasta ahora ha permanecido apurando su recuperación, salpicada de alguna salida nocturna que le han valido críticas y hasta una multa, la semana pasada.

Ronaldo quiso apresurar su debut para que la prensa deje de centrarse en su vida privada y vuelva a darle atención al deportista que fue uno de los principales artífices del título de Brasil conseguido en Corea y Japón en 2002, certamen en el que terminó como máximo goleador.

El próximo fin de semana, Ronaldo podrá poner sus habilidades a prueba ante un rival de mucha más entidad que el de hoy, el Palmeiras, uno de los mayores rivales del Corinthians, en choque correspondiente al campeonato regional de Sao Paulo.