El Mobile World Congress es un embudo que absorbe cada año a unas 50.000 personas que buscan crear la idea, el teléfono, el contenido que atraiga al mayor número de usuarios posible a nivel mundial. Pero en la feria de Barcelona también cabe mostrar proyectos dirigidos a un grupo limitado de usuarios.

La Fundación Vodafone ha desarrollado junto a Technosite y con la colaboración de la Agencia Estatal del Medicamento y Farmaindustria un sistema que permite a las personas ciegas o con visibilidad reducida saber si la caja del medicamento que van a tomar está caducada, cuál es la composición de su contenido, así como los detalles que se incluyen en el prospecto. Esta información no se incluye en el código Braille que se incluye en las cajas actualmente.

La clave no es nueva, son los códigos bidimensionales que se utilizan para otras muchas aplicaciones, pero esta vez dirigida a un sector muy concreto de la población. La cámara del móvil, que debe tener autofocus, lee el código de la caja del medicamento y el programa informa con voz de todo lo que necesite saber el usuario. La información del prospecto está continuamente actualizada gracias a la colaboración de la Agencia Estatal del Medicamento.

Además se guarda la información de los últimos diez medicamentos consultados, no es posible incluir más por las restricciones de la normativa de protección de datos, ya que se trata de información personal sobre perfil clínico.

En el proyecto, que finalizó el pasado mes de diciembre y cuyos resultados serán presentados el próximo mes de marzo, se han invertido 300.000 euros de los que 200.000 han sido subvencionados con cargo al Plan Avanza del Ministerio de Industria y el resto ha sido aportado por Fundación Vodafone.

Los sistemas operativos utilizados han sido Symbian, de Nokia, y Windows Mobile, ambos abocados a desaparecer por la alianza entre ambas compañías, pero Jonathan Chacón, consultor de Technosite, tranquiliza diciendo que 'el algoritmo está desarrollado y es fácilmente transportable a otras plataformas'. También se ha probado en teléfonos con sistema operativo Android de Google.

Ahora la idea es lograr la comercialización del producto una vez esté preparado para ser adoptado por una tipología variada de usuarios, desde personas mayores a cualquier otro tipo de persona con dificultades de visión.