El consorcio liderado por el grupo austro-canadiense Magna, que puja por el fabricante automovilístico alemán Opel, reclama a General Motors (GM) los derechos intelectuales de la marca, informó hoy la prensa rusa.

Al vencer hoy el plazo límite para presentar las solicitudes definitivas, Magna y sus socios rusos -el fabricante GAZ y el estatal Sberbank- se plantean "presentar un ultimátum", señaló el diario de negocios "Kommersant".

"O bien GM vende Opel con el derecho de utilizar toda su propiedad intelectual, o bien Magna y Sberbank abandonarán las negociaciones con el consorcio", explicó al rotativo una fuente cercana a las conversaciones.

La fuente precisó que Magna pretende obtener los derechos para comercializar los automóviles Opel bajo su propia marca, de hacer cualesquiera modificaciones en su estructura y de copiar ciertas soluciones técnicas a la hora de crear nuevos modelos.

Agregó que esta postura cuenta con el respaldo del Gobierno de Rusia, si bien no reveló si Magna y sus socios rusos se proponían aumentar su oferta en metálico, que hasta ahora era de unos 500 millones de euros.

Otras fuentes del diario opinaron que, si GM aceptara esa oferta, las partes podrían cerrar la transacción en dos semanas, teniendo en cuenta que las autoridades federales y regionales alemanas parecen respaldar la venta de Opel a Magna.

Si GM acepta la última demanda y opta por la oferta rusa, en detrimento del inversor belga RHJ International y del chino BAIC, será la primera vez que los consorcios occidentales vendan a Rusia los derechos a la propiedad intelectual de los modelos existentes.

De acuerdo con esa oferta, Magna prevé adquirir un 20% de Opel, mientras que sus socios rusos GAZ y Sberbank asumirían el 35% y la plantilla de la firma alemana el 10%.