El juez instructor del caso Gürtel en el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM), Antonio Pedreira, ha decidido mantener en prisión preventiva al empresario Francisco Correa, presunto cerebro de la trama de corrupción, tras interrogarle durante cerca de tres horas y media.

El magistrado, a instancias de las fiscales Anticorrupción Miriam Segura y Concha Sabadell, se opuso a la puesta en libertad de Correa, tal y cómo reclamaba su defensa, al entender que todavía existe un elevado riesgo de fuga.

Tras su declaración, Pedreira imputó a Correa un total de seis delitos: asociación ilícita, cohecho, tráfico de influencias, fraude fiscal, blanqueo de capitales y falsedad documental.

El magistrado atribuyó estos mismos delitos al presidente de Constructora Hispánica, Alfonso García Pozuelo-Asins, y al ex director de Calidad y Formación de la empresa FCC Construcción Enrique Carrasco Ruíz de la Fuente, a los que también interrogó hoy como imputados por su presunta implicación en la trama de corrupción.

Según informaron fuentes del TSJM, tanto García Pozuelo- Asins como Carrasco Ruiz quedaron en libertad sin medidas cautelares tras prestar declaración ante Pedreira.

Las fuentes consultadas explicaron que el abogado de Correa, José Antonio Choclán, pidió al juez Pedreira la puesta en libertad de su cliente argumentando para ello, entre otros motivos, que el empresario tiene que cuidar de un hermano discapacitado.

Tanto las fiscales Sabadell y Segura como el magistrado Pedreira entendieron que los motivos aludidos no eran suficientes como para ordenar la salida de prisión de Correa, por lo que el empresario fue trasladado de nuevo a la prisión madrileña de Soto del Real tras su declaración.

Correa abandonó la prisión de Soto del Real (Madrid) en una ambulacia para evitar que el empresario, que padece claustrofobia, no sufriera un ataque al ser transportado en uno de los furgones blindados.

El pasado martes el juez Pedreira, en sus primeras diligencias como instructor del caso Gürtel, tomó declaración como imputados al diputado regional Alfonso Bosch, al ex viceconsejero de Inmigración de la Comunidad de Madrid Carlos Clemente Aguado y al abogado Santiago Lago Bornstein.

El juez, a instancias de las fiscales Sabadell y Segura, decidió dejar en libertad sin medidas cautelares a Bosch, Clemente Aguado y Lago Bornstein, pero les imputó un total de seis delitos.

Además, la Cadena Ser ha difundido nuevas grabaciones que demuestran la estrecha relación que tenía el presidente de la Generalitat, Francisco Camps, con Álvaro Pérez, responsable de Orange Market y conocido como El Bigotes.  Dichas conversaciones recogen como El Bigotes ostenta sobre la posibilidad de organizar 'por la cara ' la visita del Papa a Valencia. Además Correa confirma la amistad que une a Álvaro con Camps:  '¡Cómo le quiere Camps!'.