Hillary Clinton inspira desconfianza en un número creciente de electores, incluidos los demócratas, y entre éstos ahora cuenta con el respaldo de sólo el 41 por ciento, mientras que el 51 por ciento prefiere que Barack Obama sea el candidato presidencial del partido, según un sondeo publicado hoy.

El sondeo, del Washington Post y la televisión ABC, indica que un 54 por ciento de los estadounidenses tiene una opinión desfavorable de Hillary Clinton, lo que supone un aumento considerable desde el sondeo anterior, el 12 de enero, cuando la cifra correspondiente era de sólo el 40 por ciento.

Entre los demócratas, el 62 por ciento cree que Obama tendrá más posibilidades de vencer al rival republicano, John McCain, en las elecciones en noviembre, frente al 31 por ciento que ve más probabilidades de una victoria para los demócratas si Clinton es la candidata.

En enero, la ventaja era para Clinton, ya que el 47 por ciento le daba más posibilidades y sólo el 42 por ciento creía que Obama sería el candidato demócrata más fuerte.

El mismo sondeo indica que Obama vencería al previsible candidato republicano, John McCain, por un 49 por ciento a un 44 por ciento, mientras que Clinton perdería ante McCain, ya que la demócrata cosecharía sólo un 45 por ciento de los votos frente a un 48 por ciento para el republicano.

Obama ha avanzado también en otras muchas categorías, aunque Clinton todavía le supera en algunas, notablemente en ser considerada la persona "más experimentada" a la ahora de asumir la presidencia por el 67 por ciento de los demócratas, frente al 24 por ciento para Obama.

Preguntados quién era más sincero y digno de confianza, sólo el 30 por ciento de los demócratas nombraron a Hillary Clinton, mientras que el 53 por ciento optó por Obama.

Entre los estadounidenses en general, sólo un 39 por ciento opina que Hillary Clinton es "sincera y digna de confianza", e incluso entre los demócratas sólo el 63 por ciento consideran que la ex primera dama es "sincera".

El Washington Post, al publicar hoy los resultados del sondeo, que se efectuó el domingo pasado, señala que la confianza en Clinton habrá resentido la controversia levantada por sus recientes afirmaciones, después retiradas, de que tuvo que esquivar a los francotiradores en una visita a Bosnia en 1996.