El documentalista de TV3 Felip Solé contrapone el testimonio de supervivientes del campo de Argelers con la "verdad oficial" sobre la logística de este campo de concentración hallada en cientos de documentos, en un trabajo que ha requerido dos años de investigación.

En su libro, "Camp D, Argelers 1939-1942" sobre el campo de concentración francés donde fueron recluidos más de 100.000 republicanos españoles huidos de la España franquista, Solé rescata fotos y fuentes documentales inéditas hasta hoy en día, con la colaboración del periodista francés Grégory Tuban.

La idea de este libro (Cossetània Editores y TV3) parte de un documental televisivo del mismo nombre emitido por la televisión autonómica TV3 el 2 de octubre de 2009, setenta años después del final de la Guerra Civil española, en el que Solé ofrecía decenas de testimonios inéditos recogidos desde 2004, "un documental de noventa minutos sobre la vida humana", según confesó él mismo por entonces.

De este modo, Solé y Tuban han realizado durante los dos últimos años un enorme trabajo de campo buscado fuentes documentales administrativas en miles de fichas, documentos y archivos departamentales "para mostrar la 'verdad oficial' de esta época, muy diferente de la documental", argumenta Solé en una entrevista con EFE.

"La vida en el campo era una vida detrás de las alambradas, comiendo muy mal, con episodios de tifus, disentería y dos docenas más de enfermedades, con bebés, mujeres, niños y gente que tenía hasta setenta años y más...", explica conmovido Felip Solé.

Para los exiliados, este campo de arena a pie de playa y sin letrinas, en donde los deportados debían hacer sus necesidades al aire libre y a la vista de todos, era "la negación de todos los derechos más elementales del individuo en función de una supuesta peligrosidad y una 'no' cabida en la economía nacional francesa", enfatiza Solé.

Según los documentos oficiales del campo recabados por el autor, al acabar la Guerra Civil española, a los republicanos españoles refugiados que eran militares, les ofrecieron dos únicas alternativas: "volver con Franco o ir a la Legión francesa".

"En cambio, para los civiles republicanos, esta situación les provocó la deportación forzosa hacia España, ya que la administración francesa se quiso quitar de encima apresuradamente bocas inútiles y poco productivas".

En el aspecto fotográfico, el libro consta de un "Inventario visual" de todas las etapas del campo, ya que las conocidas sólo hacían mención a sus dos primeros meses de funcionamiento, cuando Argelers fue noticia de portada en todos los periódicos del mundo.

Aunque el libro consta de cincuenta fotografías, algunas inéditas, sus autores han recopilado un total de trescientas fotos de numerosos archivos procedentes de la Cruz Roja, Nueva York, París o de particulares, muchas de las cuales no se han podido publicar "porque los familiares no querían herir la memoria de sus padres".

"En cuanto a nosotros, los jóvenes que nunca conocimos aquella sociedad pese a que escuchamos hablar de ella constantemente como si fuera un secreto, los benjamines que no han sabido nunca como vivieron sus padres y abuelos, tenemos un vínculo tenaz que nos une a aquel exilio republicano: el recuerdo de su sociedad extinguida, pero moralmente vencedora", escriben en el prólogo sus dos autores.