"En el spot de Campofrío se echa de menos a Hitler compartiendo jamón con Ana Frank"

Se acerca la Navidad y con ella los anuncios que pretenden llegarnos a la patata. En algunas ocasiones la intención, que parte de una premisa bastante hipócrita, la de emocionarnos para vendernos un producto, se queda a medio camino y dispara con balas de fogueo. En otras directamente les sale el tiro por la culata. Esto es lo que le ha pasado a Campofrío con su nuevo anuncio, en el que realiza una serie de comparaciones que a la postre resultan algo más que odiosas.

El tema central de la campaña gira en torno al concepto de las 'dos Españas'. Un país que parece condenado a estar permanentemente dividido sea por la causa que sea. Pero ya está la marca de pavo para unirnos de la mano y hacer que caminemos juntos por la pradera en este atardecer idílico.

La perversa moraleja del asunto reside en comparar, por ejemplo, a un golpista con un demócrata. La comparación de un fascista con un rojo puede hacer sangrar por los ojos a cualquier persona que empatice con las reivindicaciones que se realizan por la Memoria Histórica.

Además, hay otras comparaciones y sus relatos, como la de los taurinos y los antitaurinos y la de los veganos y los cárnivoros que dejan posos para la reflexión.

Me declaro fan de la contraposición antidisturbios/manifestante, en la que el manifestante reivindica su derecho a manifestarse y el antidisturbios reivindica su derecho a dar palos a los manifestantes. También soy fan del españolista/independentista, en el que el independentista reivindica su derecho de autodeterminación y el españolista a votar el futuro de Cataluña...

Puestos a comparar, extendamos las rivalidades hasta donde nos deje la imaginación

Siempre dividos, mira que tenéis ganas de fastidiar la marrana