Las redes desmontan las alabanzas a la reina Sofía: "Dignidad es decir al maromo que te humilla y engaña 'que te den'. Seas reina o plebeyo"

En general con esto de la monarquía en este país siempre hemos sido muy de mirar el dedo cuando nos señalan la luna. No es tanto si son campechanos, preparados y modernos o lo contrario, sino si tiene sentido una institución hereditaria y todo lo que implica, a estas alturas de la película.

En los últimos días, con el rey emérito ya amortizado, han salido unos audios suyos con Barbara Rey y una vez más los árboles nos están impidiendo ver el bosque. Como ha reflexionado el periodista y escritor Juan José Millás, lo estamos llevando por el camino de la salsa rosa cuando lo que se puede deducir es infinitamente más fuerte.

En medio de este carajal real, la reina Sofía presidió este lunes el acto solemne en el que se conmemoró el XIX aniversario de la creación de la Unidad Militar de Emergencias. Allí la ministra Margarita Robles hizo un panegírico de la reina emérita, a la que trasladó el cariño, apoyo y agradecimiento de los españoles "en estos momentos". "Nos sentimos muy orgullosos de usted, de su hijo y de la princesa de Asturias. Ellos siguen y seguirán siempre su ejemplo", aseguró.

Por su parte, la diputada del PP Ester Muñoz alabó en su cuenta de la red social X la "dignidad de la mejor y primera servidora pública".

Por cierto, curioso detalle de la "mejor servidora pública", que en el acto al parecer llevaba un broche que el dictador Francisco Franco le regaló.

En las redes muchos están reflexionando si "dignidad" es la mejor palabra que se puede usar en este caso.

El mejor ejemplo de lo que significa la monarquía en su más amplio sentido no lo dio un sesudo estudio, ni la reflexión de un convencido republicano. Nos la regaló el propio Juan Carlos I cuando después de estallar sus tejemanejes una periodista le preguntó si quería dar explicaciones y él respondió sonriendo: "¿Explicaciones? ¿De qué?".