Un turista español de 43 años murió el pasado domingo en un Parque Nacional de Sudáfrica tras ser atacado y aplastado por un elefante. Así lo ha confirmado este martes la Policía de Mogwase (norte), ciudad próxima a la reserva natural.

El hombre, que viajaba con su prometida y otras dos mujeres de nacionalidad sudafricana en su vehículo particular, detuvo el automóvil, se bajó y se acercó para tomar fotografías a una manada de tres elefantes con tres crías en el complejo de Pilanesberg. En ese momento, los animales le atacaron y le mataron.

Aunque el portavoz policial no ha facilitado información sobre la identidad de la víctima, el periódico el Heraldo de Aragón, que cita fuentes oficiales españolas, confirma que se trata del ciudadano Carlos Luna, un vecino de la localidad de Ejea de los Caballeros, Zaragoza, que participaba en un safari fotográfico.

Fuentes del Ministerio de Asuntos Exteriores también han confirmado a EFE el fallecimiento y la asistencia a la familia desde la Embajada de España en Pretoria. Según testigos presenciales, a pesar de las advertencias de sus compañeros de viaje y de los ocupantes de otros dos vehículos que se encontraban en el lugar del avistamiento, "lamentablemente no hizo caso" y, cuando se acercó, un elefante adulto terminó cargando en su contra.

"Desgraciadamente, no pudo escapar ni eludir al elefante, al que se había unido toda la manada. Fue alcanzado y pisoteado hasta la muerte. Los animales se alejaron inmediatamente del lugar sin agredir a los vehículos cercanos y, finalmente, desaparecieron entre los arbustos", han informado el director interino de conservación de la Junta de Parques y Turismo de la provincia del Noroeste (donde está la reserva), Pieter Nel.