Los juegos más complejos de la historia arrancan este viernes después de  muchos accidentes. A pesar de la dudosa continuidad, finalmente el COI ha descartado su cancelación. 

El relevo de la antorcha olímpica de los Juegos de Tokio 2020 finalizó este viernes en una ceremonia a puerta cerrada por la covid-19, horas antes de culminar su papel con el encendido del pebetero en el Estadio Olímpico en la ceremonia de inauguración. 

El actor de teatro kabuki Kankuro Nakamura, destacada figura de las artes escénicas japonesas, fue el último relevista en recibir la llama y el encargado de protagonizar el encendido simbólico de un pequeño pebetero, como en otras ceremonias similares que han tenido lugar a lo largo del recorrido por el país por la pandemia.

Tokio lo tenía claro, todas las medidas de seguridad, camas anti sexo y responsables con el medio ambiente, sin público, a las instalaciones solo pueden entrar los deportistas, sin embargo, antes de su arranque, son bastantes los inconvenientes surgidos.

Dimite el director de la ceremonia inaugural 

Uno de los directores artísticos de la ceremonia inaugural de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, prevista para mañana viernes, ha presentado este jueves su dimisión tras las críticas recibidas por bromear sobre el holocausto hace años. 

Kentaro Kobayashi, un humorista y director de teatro nipón, ha renunciado a su cargo como director de las ceremonias de apertura y cierre de los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de Tokio a raíz de las protestas generadas por sus "inapropiados" comentarios, según anunció este jueves el comité organizador en rueda de prensa.

El enésimo escándalo que salpica a los Juegos llega un día antes de su inauguración, y tiene lugar dos días después de que dimitiera también el compositor de parte de la música que iba a ser empleada en la ceremonia, tras otra polémica por una antigua entrevista en la que admitía haber realizado acoso escolar a discapacitados.

Golpes de calor 

La arquera rusa Svetlana Gomboeva se desvaneció este viernes por el calor tokiota durante la ronda clasificatoria de los Juegos Olímpicos de Tokio, y recuperó la conciencia tras ser atendida por personal sanitario y de su equipo. 

Gomboeva, de 23 años, compite en la categoría individual y tenía una prueba clasificatoria a las 9:00 de la mañana (00:00 GMT), cuando el mercurio en la capital marcaba ya los 30 grados con una humedad del 60%. 

La arquera se derrumbó tras revisar su puntuación final y tuvo que ser atendida por personal sanitario y los compañeros de su equipo, que compiten sin bandera a través del Comité Olímpico Ruso (COR), según recogió el diario deportivo nipón Sports Nippon Anenex. 

Gomboeva recuperó rápidamente la conciencia, pero tuvo que ser sacada de la arena en camilla. La deportista rusa dijo posteriormente en declaraciones a los periodistas que es la primera vez que le sucede algo así y que la humedad ha sido un factor clave.

La burbuja covid ya está "rota"

Tokio 2020 estará marcado por las medidas anti covid que se llevan aplicando desde antes de su inauguración. Los juegos no tendrán espectadores, 68.000 asientos vacíos. 

Todos los deportistas extranjeros tuvieron que realizarse pruebas anti covid antes de abandonar el país de origen, para así no realizar los 14 días de cuarentena. Los deportistas también deberán usar mascarillas en los recintos. Cada cuatro días deberán volver a hacerse una prueba para controlar el coronavirus y diariamente se les hará una prueba de saliva contras las variantes de la covid-19. 

A pesar de todas las medidas de seguridad, el coronavirus se ha hecho un hueco entre los deportistas y la burbuja covid ya está "rota". 

Tres días antes de dar comienzo a los Juegos Olímpicos, se notificaron 71 casos positivos vinculados a los juegos. Los dos días previos, cuatro deportistas nuevos daban positivo. 

Aun así, el COI finalmente ha descartado cancelar los juegos, pero los deportistas contagiados deberán hacer hacer cuarentena pertinente.