¿Qué tipos de aborto hay en España?

El Ministerio de Igualdad espera llevar la nueva ley del aborto al próximo Consejo de Ministros. Esto ha provocado que el derecho a la interrupción voluntaria del embarazo vuelva a estar en el foco.

Según el borrador de la nueva norma, hay grandes cambios que suponen un avance en los derechos de las mujeres, como el hecho de recuperar la interrupción del embarazo a partir de los 16 años sin consentimiento parental o un cambio de modelo para garantizar que estos procesos se realicen prioritariamente en centros públicos y que el uso de centros privados y concertados sea excepcional. Pero, ¿qué tipos de aborto existen?

Aborto natural o espontáneo

El aborto natural o espontáneo es la pérdida involuntaria de un embarazo. Alrededor del 10% al 20% de los embarazos diagnosticados terminan en un aborto espontáneo, según recoge el Hospital Clínica Isadora de la Comunidad de Madrid. Sin embargo, es probable que este número sea mayor, ya que muchos casos pasan desapercibidos para la mujer ya que suele ocurrir en etapas tempranas del embarazo.

Ante la mínima sospecha de aborto espontáneo se recomienda a acudir al centro de la salud más cercano para recibir la atención médica necesaria y evitar posibles complicaciones.

Aborto inducido o provocado

El derecho al aborto realmente se refiere a la libre elección de las mujeres de interrumpir voluntariamente el embarazo. En España se puede hacer hasta la semana 14 de gestación. También puede ser un aborto terapéutico, que se realiza por razones médicas y, bajo este caso, se puede llevar a cabo hasta la semana 22. 

Las interrupciones voluntarias del embarazo se pueden llevar a cabo a través de dos métodos:

Farmacológico: consiste en la administración de la píldora abortiva. Por lo general, este método se emplea antes de la semana siete de gestación.

Quirúrgico: son procesos instrumentales que pueden requerir de anestesia o sedación, control ecográfico y, en muchos casos, cuidados posteriores. Antes de las 14 semanas se considera que es un proceso de bajo riesgo y entre la semana 14 y la 20 ya se considera de mayor riesgo. Después de la semana 20, se realizará inducción del parto.