El rector de la Politécnica intentó reducir el efecto de las informaciones sobre su vicerrectora con una carta a la RAE

Guillermo Cisneros Pérez, rector de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM), mandó una carta a los miembros de la Real Academia Española (RAE) para apoyar a Asunción Gómez-Pérez, vicerrectora de la universidad relacionada con la formación de comisiones pantalla para la adjudicación de ayudas millonarias, y minizar las dudas y acusaciones sobre su candidatura durante la elección para el sillón "q" de la institución, a la que la docente era aspirante.

Tras las informaciones desveladas en exclusiva por Público, en las que se recoge documentación que muestra que Asunción Gómez-Pérez permitió que durante la adjudicación de fondos europeos en la UPM se formaran comisiones pantalla y se regateara la orden del Ministerio de Universidades, varios miembros de la Real Academia Española mostraron sus dudas en torno a la candidatura de la vicerrectora. Por ello, Cisneros envió una misiva en la que, pese a reconocer que la adjudicación de las ayudas se hizo como desvelaba este diario, niega que se hubiera incumplido la legalidad. 

El objetivo de esta carta, a la que ha tenido acceso Público, tenía como fin contrarrestrar las dudas que varios académicos tenían sobre la aspirante al sillón "q". Finalmente, el pasado jueves tuvo lugar la votación y Gómez-Pérez, que competía con el catedrático Senén Barro por el puesto, salió ganadora y se convirtió en una de las pocas mujeres que ha llegado a ser académica de la RAE. 

"La Comisión a la que se refiere el citado artículo es la Comisión de Investigación de la UPM (...) Lamento profundamente la aparición de este artículo, de contenido infundado y no contrastado, que afecta a tan prestigiosa institución como es la RAE", sostiene la carta enviada horas antes de la votación. 

11 millones de euros

La Orden del Ministerio de Universidades era clara: la comisión tenía que estar formada mayoritariamente por miembros externos de la universidad para evitar conflictos de intereses. La UPM organizó una comisión formal, pero fue otro comité, integrado en su totalidad por trabajadores de la Politénica, el que evaluó a los candidatos. Y la comisión oficial puso las notas tal cual salieron de la comisión interna. De esta forma, no se siguieron las pautas indicadas por el Ministerio. En total, las ayudas son de casi 11 millones de euros. 

El Ministerio de Universidades era claro con su orden: "Las comisiones de evaluación estarán formadas por, al menos, tres personas docentes o investigadoras de reconocido prestigio. Además, estarán constituidas, mayoritariamente, por miembros externos a la universidad convocante", reza el escrito.

Un rector con varios frentes abiertos

No es la primera vez que el rector de la Universidad Politécnica de Madrid es noticia. Hace unas semanas, Público sacaba a la luz que Guillermo Cisneros regatéo a su propia universidad para cambiar los criterios de contratación de profesores, algo que ha provocado que la UPM esté envuelta en varios juicios. 

Cisneros alteró los criterios que se solicitan al profesorado que opta a las plazas públicas sin la aprobación necesaria del Consejo de Gobierno de la universidad, según documentación oficial a la que tuvo acceso este periódico.

Las modificaciones en las convocatorias deberían haber pasado antes por una aprobación del Consejo de Gobierno. Estos cambios no autorizados por los órganos correspondientes han traído problemas a varios profesores aspirantes, que han sido rechazados por cuestiones puramente técnicas, aunque tenían las cualidades y la experiencia óptima para esos cargos.