El incendio forestal declarado en el municipio de La Estrella, en Toledo, mantiene su situación operativa a nivel dos por posible afección a bienes no naturales y a infraestructuras esenciales, según el Servicio de Prevención y Extinción de Incendios Forestales de Castilla-La Mancha (Infocam). Cuatro municipios aledaños de la zona afectada han sido confinados por los peligros que puedan causar el humo. 

El fuego afecta ya a 2.500 hectáreas y se encuentran trabajando en las labores extinción un total de 134 personas, después de que se incorporaran este miércoles más de 70 efectivos de la Unidad Militar de Emergencia (UME). De este modo, las autoridades han recomendados a los vecinos de La Estrella, Fuentes, Aldeanueva de Barbarroya y La Nava de Ricomalillo que no salgan de sus domicilios. 

El director técnico del incendio, Juan Pedro García, ha explicado este miércoles a los medios de comunicación desplazados a la zona que el incendio podría quedar estabilizado la próxima noche "en el mejor de los casos", al tiempo que ha confiado en que el viento no sea tan fuerte como el que sopló en la tarde del martes. Según ha explicado, el incendio avanzó "muy velozmente" y que "tenía unas tasas de propagación muy complejas".

Asimismo, García ha detallado que el sector más activo es el norte, mientras que en la zona sur se está permitiendo de forma puntual que los propietarios de ganado vayan a alimentarlo.

La zona alcanzada por las llamas pertenece a la comarca toledana de La Jara, eminentemente ganadera y con un alto valor ecológico ante la abundancia de vegetación, rutas senderistas y zonas de baño naturales. 

El incendio, que abarca una superficie de terreno de pastizal-matorral, fue detectado sobre las 13.30 horas de este martes por un vigilante. Los servicios de emergencia, a lo largo de la noche, consolidaron el perímetro del fuego gracias al trabajo de la maquinaria. 

Además de los medios regionales que trabajan en la zona y de la UME, también se encuentran la Brigada de Refuerzo de Incendios Forestales (BRIF), de La Iglesuela del Tiétar (Toledo) y la del Puerto el Pico (Ávila), ambas pertenecientes al Ministerio de Transición Ecológica, que en sus perfiles de la red social X (antes Twitter) han indicado este martes que habían sido activadas para participar en las tareas de extinción.