Controlados los incendios en Lugo y Castelló, mientras el viento complica la extinción en Asturias

Las autoridades valencianas han dado por controlado el incendio de Villanueva del Viver (Castelló) durante la tarde de este viernes. Sobre las 19.00 horas, los bomberos se retiraban de la zona después de comprobar mediante un vuelo de reconocimiento que no había ninguna llama en el perímetro. El fuego llevaba ocho días activo y ha calcinado más de 4.700 hectáreas de gran valor ambiental. Las emisiones de dióxido de carbono se han disparado a raíz de la oleada de incendios que durante las últimas jornadas puso en jaque varias regiones de la península.

En Baleira, un municipio de la provincia de Lugo, los operativos también han conseguido extinguir las llamas que amenazaban desde el martes a la población de la zona. La Consellería de Medio Rural de la comunidad ha confirmado tener el foco bajo control, un accidente forestal que acabó con 1.400 hectáreas y obligó a desalojar varias aldeas de la localidad. La Guardia Civil investiga a un vecino de 78 años como presunto autor de la quema que pudo originar la catástrofe.

En Asturias, en cambio, las condiciones meteorológicas complican las tareas de control. Según apuntan desde el SEPA (Servicios de Emergencia del Principado), las fuertes ráfagas de viento dificultan el trabajo de los bomberos desplazados en los montes de la comunidad, que mantiene un centenar de focos activos. Con los incendios de Galicia y País Valencià bajo control, el avance del fuego que este viernes por la mañana hacía saltar las alarmas en buena parte del país parece dar una tregua que podría mantenerse durante el fin de semana.

Los vecinos vuelven a sus casas en Castelló

Este viernes por la mañana el president de la Generalitat, Ximo Puig, anunciaba que el incendio que permanecía activo desde la semana pasada en Villanueva de Viver, muy cerca de la frontera con Teruel, se consideraba estabilizado. Unas horas más tarde, el director del Puesto de Mando Avanzado (PMA) del foco confirmaba su extinción después de una exhaustiva inspección tanto aérea como terrestre. 

El secretario autonómico de Emergencias, José María Ángel, ha asegurado que, pese al control de la situación, se mantendrán en la zona varias unidades y un medio aéreo con capacidad para actuar "en cualquier momento". El fuego ha destrozado más de 50 kilómetros de perímetro de un incalculable valor ecológico. 

Más de 1.300 vecinos han tenido que ser desalojados durante las tareas de extinción. Todos ellos han podido regresar este viernes a sus domicilios. Los últimos en hacerlo han sido los de Montán, Montanejos y Fuente la Reina, tres de las poblaciones más afectadas. Antes de permitir su retorno, los bomberos han supervisado la recuperación de los suministros básicos de luz, agua y telefonía. La Policía mantiene un dispositivo especial de vigilancia en el lugar para evitar la afluencia masiva de personas ajenas a los municipios justo cuando dan comienzo las vacaciones de Semana Santa. Asimismo, se recomienda no visitar las zonas quemadas y mantener la "máxima precaución" en caminos y vías secundarias.

La intencionalidad humana, culpable en Galicia

Los montes de Baleira (Lugo) también han dejado de arder. La Xunta de Galicia ha confirmado la extinción de un foco que ha destruido casi 1.500 hectáreas, la mayoría de ellas sin arbolado. Este es el primer gran incendio del año en la comunidad y todo apunta a que el fuego fue provocado. La Guardia Civil sigue la pista de un hombre de 78 años como presunto autor de los hechos. Se cree que el vecino realizaba una quema de restos forestales sin autorización administrativa, por lo que estaría cometiendo una imprudencia grave. Decenas de residentes han tenido que ser desalojados desde el martes, cuando comenzaron las llamas, aunque este viernes han podido regresar a sus casas.

El viento no da tregua en Asturias

Asturias se despertaba este viernes con más de 110 focos activos en toda la comunidad. Los servicios de emergencia llevan todo el día trabajando contrarreloj para controlar la situación, pero el fuego sigue activo, siendo Valdés la zona más afectada. Las fuertes ráfagas de viento han dificultado durante las últimas horas de la tarde las las tareas de extinción. Uno de los incendios ha quemado el monte Naranco, a las puertas de Oviedo, poniendo en alerta la capital asturiana. Un reportaje de Nortes señala al hombre como principal responsable por sus intereses ganaderos y monetarios. Alejandro Calvo, consejero de Medio Rural del Principado, también considera que las llamas son "provocadas" y asegura que "no tienen precedentes".

La directora general de Salud Pública del Ejecutivo asturiano, Lidia Clara Rodríguez, ha recomendado a los vecinos de las zonas más afectadas que eviten salir de sus viviendas por la contaminación aérea desencadenada. El organismo aconseja a la población estar el menor tiempo posible al aire libre, reducir la ventilación en los domicilios y utilizar mascarillas en caso de tener que salir al exterior. La petición busca "proteger a los más vulnerables". Con estas actualizaciones, el fuego ya ha arrasado 28.400 hectáreas en todo el país en lo que va de año, es decir, tres meses. Esta cifra supera con creces los registros anuales de temporadas previas, un dato que pone en evidencia la grave emergencia climática y la necesidad urgente de abordarla.